El alcalde de O Barco pide que no se utilice el coche para acudir al recinto
La coincidencia de fechas con las fiestas en honor de la Octava del Corpus obligó a trasladar la feria mensual de Viloira desde su ubicación habitual, en la Praza de Otero Pedrayo y alrededores, al espacio de O Campiño. Esta circunstancia, que muchos vecinos no recuerdan haber vivido, obligó a esforzarse a la Policía Local para informar a los vendedores del cambio de ubicación.
No es la primera vez que sucede, pero hace muchos años que no se daba esta coincidencia de la feria con las fiestas, que se desarrollarán a partir del día 3 de junio. El día propio de la fiesta es el 6 de junio, lo que impidió cambiar los actos a otra fecha.
El problema no reside únicamente en el cambio de ubicación de los puestos, sino también en los lugares destinados al estacionamiento, pues O Campiño es el lugar que suelen utilizar los dueños de las atracciones de la fiesta para dejar sus vehículos. Algunos ellos ya están aparcados en el área recreativa de Viloira desde el pasado fin de semana. La presencia de estos vehículos no hace sino complicar aún más las cosas, pues este lugar es el elegido habitualmente por una buena parte de los visitantes de la feria para aparcar.
Estas complicaciones fueron analizadas por el alcalde, Alfredo García Rodríguez, y los agentes de la Policía Local. Horas después, el regidor realizó un llamamiento a los vecinos de O Barco a no coger el coche en sus desplazamientos a la feria del próximo lunes.
En la mesa de trabajo también se decidió que los lugares de O Campiño a los que deberán trasladarse los feriantes serán delimitados con cal este viernes. A su vez, los agentes de la Policía Local estarán atentos a la llegada de los vendedores desde primera hora.
Todas estas medidas pretenden reducir al máximo las molestias que plantea la situación. En todo caso, el regidor confía en que no se produzcan complicaciones.
