Los chozos de la guerrilla antifranquista en Casaio (Carballeda de Valdeorras) volverán a ser excavados por la asociación científica Sputnik Labrego. El 20 de junio un equipo formado por siete investigadores regresará a Valdeorras para recoger testimonios de la vida de los “fuxidos”, según apuntó el director de los trabajos, Carlos Tejerizo.
En esta ocasión, los investigadores permanecerán dos semanas en la zona, donde excavarán cinco chozos e investigarán en los restos de las construcciones del destacamento penal de las minas de wolfram de Valborrás.
Son dos los chozos que despiertan un mayor interés en los arqueólogos. En primer lugar está el campamento de Burgozos. Detectado hace varios años por el equipo, “pensamos que podía ser un nexo central entre varios grupos”, comentó Carlos Tejerizo. Este punto está localizado en el Val da Morteira.
Un segundo punto que captó la atención del equipo es el ubicado en la parte inferior del bosque del Teixadal, en las inmediaciones del río. En este caso, los investigadores tratarán de determinar si fue utilizado más bien como refugio, por estar situado en una pala.
La campaña de este año será aprovechada para finalizar la grabación del documental que mostrará los trabajos de Sputnik Labrego en la zona, una labor que obligará a viajar a Ourense para filmar las piezas ya depositadas en el Museo Arqueolóxico Provincial.
