San Sebastián ha puesto sobre las mesas sus cartas. Ya conocemos las cuatro películas españolas que competirán por la Concha de Oro. Pues bien, resulta que tres de las cuatro películas seleccionadas van a tener una vida más bien corta, por no decir testimonial, en las pantallas. Las obras de José María del Orbe, de Agustí Villaronga y de los codirectores Jaume Cadena y Judith Colell, lo tendrán difícil incluso para ser estrenadas en provincias. La cuarta en concurso, 'El gran Vázquez', de Óscar Aibar, biopic sobre el dibujante de Anacleto, será la única de las cuatro que tenga una vida comercial normalizada. No nos engañemos. El hecho de que Santiago Segura y Álex Angulo estén al frente del reparto será lo que les haga visibles.
A tenor de lo sucedido en las taquillas de este año, es fácil deducir que hay cine visible y cine invisible. En las últimas semanas se han estrenado dos películas que tienen en común haber sido vistas por menos de tres mil espectadores en salas el fin de semana de su estreno. Son 'El dios de madera', de Vicente Molina Foix, e 'Intrusos en Manasés', de Juan Carlos Claver. Salvando las distancias, es bastante probable que las cintas de Collet, Cadena, Villaronga y de Orbe a punto para competir por la Concha de Oro sean vistas por más público en las cuatro sesiones del festival de San Sebastián que cuando sean estrenadas. Aunque siempre les quedará La 2.
