Opinión

Los sembradores de odio

El conflicto Israel-Hamas-Palestina es enormemente complejo, con informaciones sesgadas, interesadas y, en demasiados casos, manipuladas. Este sensible asunto que amenaza con escaladas inimaginables y de proporciones aún desconocidas, las cuales pueden derivar en un impacto globalizado económico-social- político muy superior al de la actual guerra entre Ucrania y Rusia, pues me hace ser muy prudente en mis opiniones. Sobre todo por falta de información documental veraz, lo que me lleva a ser un mero observador, sin más. Sería una osadía por mi parte defender los postulados de unos o de otros sin tener un conocimiento detallado y profundo de un conflicto que se arrastra desde hace décadas en Oriente Medio. 

Pero sí puedo dar mi parecer sobre aquellos y aquellas que -con la misma información que manejamos cualquiera de nosotros a través de las diferentes fuentes de información al alcance de prácticamente todos- se dedican a dividir, confrontar y envenenar dialécticamente el pensamiento de las personas más influenciables. Y en esta materia, hay formaciones políticas en nuestro país las cuales son especialistas en sembrar odio con el único fin de recoger apoyos que les sirvan para conservar sus centros de poder: única y exclusivamente. 

Manifestaba públicamente hace unos días el conocido chef José Andrés -el cual al frente de su ONG realiza un trabajo memorable- su parecer sobre las insidiosas declaraciones de toda una ministra en funciones del Gobierno de este país, la señora Belarra. Literalmente esta es su frase: “No merece ser ministra, no me representa a mí, ni a España”. Y yo añado que esa es la opinión de la inmensa mayoría de los españoles y españolas, por supuesto la mía también. 

Este Gobierno bipartito nos está apartando cada vez más de la UE y del mundo occidental, para derivarnos hacia las dictaduras bananeras y comportamientos políticos feudalistas anclados en el pasado, con todo lo que ello conlleva. 

Pedro Sánchez tiene otro problema más que se le suma al de negociar su investidura y legislatura con prófugos de la Justicia como Puigdemont y cía. Y tener que llegar a acuerdos con el Bildu de Otegi. Pues bien, ahora también tiene otro frente abierto con sus socios de Unidas Podemos y Sumar. Con su Yolanda Díaz y su Ione Belarra como primeras espadas de la sinrazón, del sinsentido, de su tremendo discurso destructor. Hasta Felipe González le manda públicamente un doble recado a Sánchez y Zapatero: “Es de necios tener que rectificar a diario”. 

Pues si, sr. presidente del Gobierno en funciones de España, estos van a ser tus “queridos socios” de legislatura, en los que el fanatismo, radicalismo y la confrontación entre iguales no tiene límites. Y mi pregunta es: ¿hacia dónde quieres derivar a España y a los españoles y españolas? Supongo que no te atreverás a responder, porque si lo hicieras no nos dirías la verdad ni de lejos. Eso es lo que conlleva pactar a cualquier precio con los sembradores de odios y con sus consecuencias anexas, de las cuales, serás tú el único responsable. Así te recordará la historia, sr. presidente del Gobierno en funciones, por ejercer con una avaricia de poder infinita y desmesurada. Y donde el significado de la frase “por el interés general” queda a los pies de la absoluta nada. Ese es ya tu lamentable legado. 

Te puede interesar