Opinión

¡A jugar!

El COB no da señales de reacción y lo peor es que no aparecen las respuestas para explicarlo. No es una cuestión de jugadores ni de actitud, es que sencillamente juega peor y eso lo lleva a perder más.

Entrena bien y se entrega en los partidos, pero no juega a nada. Se ha convertido en una sucesión de relevos y de experimentos para intentar dar con una tecla “mágica” que no existe. Le llega para seguir ganando partidos, pero se estanca en una clase media inadmisible por el presupuesto con el que cuenta y por el club al que representa.

El COB no tiene excusas. Ni de presión, ni de dinámicas ni de lesiones. Tiene que ganar y para eso antes tiene que volver a jugar.

Cómo hacerlo no compete ni a los directivos que están, ni a los que están por llegar y tampoco a los aficionados. El COB tiene jugadores para jugar bien y para ganar. Para estabilizarse en un término medio entre “los 40 en cada partido” y la vulgaridad actual. 

Nadie tiene estos jugadores, un pabellón como el Pazo y una afición así en la LEB Plata. No se ha escuchado un solo pito en las gradas ni la presión es inesperada. Todo lo que ocurre es el día a día lógico de un club que ha apostado precisamente por estos jugadores, este entrenador y este director deportivo para salir de esta liga por la vía rápida. Todos ellos están de sobra capacitados para conseguirlo. Juntos, pero sin excusas ni  demoras. ¡A jugar!

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