Opinión

LOS NIÑOS DE ANGROIS Y LAS MEDALLAS

Hay un antiguo refrán que dice: 'Alábate Juan, que si no te alabas no te alabarán'. No es esta mi pretensión, pero sí recordar mi artículo publicado en La Región el día 10 del presente mes titulado 'Los 'rudos' vecinos de Angrois', en el cual resaltaba lo que literalmente dice la Enciclopedia Gallega de este lugar: 'La supuesta 'rudeza' de sus habitantes ha dado lugar a una serie de frases comunes en la comarca compostelana como 'Parece que vés de Androis' para indicar que una persona que se ve tomada por tonta'.


Como consecuencia de mi artículo, manifiesto mis gracias a un periódico gallego por dedicarme unas letras, publicadas el pasado domingo, día 18, que en síntesis dice así en su titular: 'Penedo, precursor en pedir cambios en la Enciclopedia Gallega'. Y luego añade: 'José Luis Penedo, el primero en pedir este cambio'. Después de este exordio, resulta que el pasado lunes, 26, la ministra de Fomento, Ana Pastor, confirmó en el Palacio de Raxoi la cesión de terrenos por parte de Adif, alrededor de 3.200 metros cuadrados, destinados a construir un zona infantil, un centro socio cultural y un recinto de fiestas.


Según parece, los vecinos llevaban pidiendo una zona recreativa desde hacía ¡nueve años! Y no menos una marquesina para el autobús. Esa humilde marquesina que en tiempo de espera proteja de la lluvia, inclemencias del tiempo y aporte asiento sobre todo para los ancianos y niños. Y todo esto sucede en la proximidades de la ciudad del Apóstol muy destacada en la recepción de turistas. Atrás quedó el día 24 de julio día luctuoso con la trageia de 79 fellecidos y más de un centenar de heridos. Angrois, -ayer lugar de 'rudos' y 'atontados'-, hoy, por su comportamiento tan ajeno a este sambenito, a este desgraciado calificativo, pero sí en consonancia con su altruismo, Medalla de Oro del Ayuntamiento de Santiago de Compostela, propuesta dirigida para el Príncipa de Asturias de la Concordia y Medalla al Mérito Civil.


Bueno es el acuerdo del desagravio. Más vale tarde que nunca. La pena es que los niños puedan disfrutar de su parque infantil, los adultos del centro socio cultural y recinto de fiestas, con motivo del horrendo accidente ferroviario. Un aplauso para los vecinos de Angrois y una invitación para que el Ayuntamiento de Santiago de Compostela siga alargando su brazo de protección allí donde más se necesita.


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