Opinión

SIMONE SAIBENE

He conocido a un tipo que me ha sorprendido un tanto, porque siendo italiano parece más gallego que muchos de nosotros, al menos en cuanto al mundo concreto del cine. Este tipo, joven todavía, se llama Simone Saibene y ha hecho un corto gallego que se titula 'Retorno a San Andrés' y que emula en cierta medida a aquel otro Retorno famoso, a Tagen Ata, del amigo Eloy Lozano basado en el cuento de Ferrín y que fue pionero del cine independiente en Galicia. Por cierto, en este congreso internacional de termalismo que se está llevando a cabo estos días en Ourense se exhibe magnífica exposición de fotografía en el Auditorio realizada por el propio Eloy que, además de su talento cineasta y publicista, era un gran fotógrafo. Simone ya se refirió a Eloy en algún artículo suyo como crítico de cine de la revista italiana Duellanti. Además, Simone ha sido coordinador del Jurado del Festival de cine ourensano y espero que lo siga siendo por el bien del propio festival. Desde retorno a San Andrés espero no tenga retorno Simone a Milán, ni a otro lugar del mundo si la pontevedresa Natalia también sigue con nosotros; y no tiene por qué tenerlo tampoco al mismo San Andrés como muerto, como dice el dicho, pues ya lo ha hecho en vida.




Sanxenxo


En la playa de la Carabuxeira de Sanxenxo el tiempo y los políticos no arreglan el vertido feo que divide en dos y machaca la belleza de esta playa céntrica en el veraniego pueblo ourensano. Para algún ourensano, incluso en invierno ya es su casa principal, como Mane Cuevas o Lalo Melero, que pasan más tiempo enfrente del mar que frente a o noso río pai. Y me cuenta Viruca Yebra, amiga de Irene Fernández y que fue encargada de prensa del expresidente Fernández Albor, que ya han hablado con la alcaldesa al respecto, pero con la Iglesia Política hemos topado, pues no basta con solicitar perdón por los pecados sino que se exige verdadera confesión continuada para canalizar las aguas de lluvia que desde la avenida de Madrid se vierten sobre la fina y blanca arena. Años llevan rezando rosarios para la solución-absolución, pero, impacientes ¿qué son unos varios años para la vida eterna? O a lo peor, la razón de no acabar con el problema es que al ser playa pequeña utilizada mayormente por familias veraneantes que no votan en el municipio, les importe un carajo, un carajo político que no sabe medir los impactos que estas cosas tienen para la industria turística.




Parque de San Lázaro


Dicen que van a arreglar este parque. Que el gasto supera largamente los doscientos mil euros. Y yo que paso a diario por él, que lo cruzo de este a oeste, norte sur, alrededor de la fuente, por los bordes, rodeando el arenero, aún no acierto a saber mirar, ver, observar, qué hay de tan malo en él que haya que reformar. Podría comprender una reforma estética por indicación y gusto de algún genio creativo en jardines y parques si sobrara la pasta, pero ésta es escasa, a no ser que esté yo muy engañado y que los ahorros que nos piden realizar en combustibles, ruedas y luz desde el gobierno central sean una coña marinera. Le pediría a Tito Espinosa que pare este gasto, que su percepción de cómo anda la economía actual parece estar algo desviada, pues si ayer nos ofrecieron datos de cómo siguen sumando ourensanos a la lista del Inem la cosa no está para San Lázaros anunciados.




El túnel


Terrible. Que no caigan de la burra los de Fomento sobre el trastorno que supone el cierre del túnel de A Cañiza, es como para sentirnos burros, y además con ellos encima. Uno no es ingeniero de caminos ni técnico de seguridad en los mismos, pero no creo que haga mucha falta serlo para darse cuenta que el riesgo de accidente porque haya doble carril de ida y vuelta en uno solo de los dos no debe suponer más riesgo que en el que solo hay ida, o solo vuelta, si la velocidad se cambia a unos mínimos, pongamos esos nuevos de algunas calles urbanas. A treinta por hora no veo yo dónde el peligro, no encuentro razón que lo diferencie de tantas veces que pasamos túneles en los accesos de Galicia mal iluminados de hace siglos y en doble sentido sin que la casuística fuera alarmante. Y también, para los celoso guardianes de la seguridad (alucino con lo que quieren al prójimo algunos), decirles que circular por la carretera nacional alternativa al cierre, eso sí que resulta un peligro, como ya se han recogido dos casos a lo largo de los escasos días desde que se ha abierto el tramo.

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