Opinión

LABORDETA COMO REVULSIVO

Sin poderlo remediar, la muerte de José Antonio Labordeta ha sido un revulsivo para un significativo brote social de lo mejor de las personas, se entiende que de aquellas no involucradas en la vorágine del materialismo y de la sinvergonzonería.


Pocas veces hemos podido ver tanto sentimiento y tanta sinceridad como al lamentar la pérdida de ese gran personaje de la cultura, de la canción popular y también de la política. El singular cantautor deja entre nosotros su estela de bondad y de compromiso con las causas justas, lo que supone un nuevo y señalado servicio a la lucha por la justicia en este desgraciado mundo en que vivimos. Y deja también un ejemplo extraordinario para quienes se dedican a la actividad política, por la que él pasó sin pringarse jamás en ninguna de las flaquezas a que tan acostumbrados nos tiene una significativa parte de la clase política de este y de otros muchos países. Las ambiciones, los odios, las suciedades, los cinismos, las mentiras son conceptos que no tenían sitio en su alma llena de generosidad y de grandeza. Su testimonio es inolvidable. De la trascendencia de su mensaje nos damos cuenta también en este preciso instante, sólo con mencionar algunos de los lances angustiosos que nos acompañan, y que cito a título enunciativo para que cada cual lo relacione como quiera con aquel mensaje: los brotes de racismo en Europa, como son las expulsiones masivas de gitanos. El hambre en el mundo, con la oportuna propuesta de esa tasa a las transacciones financieras internacionales, cuando los poderosos se reúnen para examinar los Objetivos del Milenio.


Las circunstancias que han concurrido para que los sindicatos se vieran obligados a convocar la huelga general del próximo día 29.El permanente salto a la actualidad mediática de nuevos datos sobre las tramas Gürtel , Brugal y demás castigos de la corrupción masiva y oceánica. Los movimientos en el seno de la organización terrorista ETA, cincuenta años después del comienzo de su siniestro periplo por la vida nacional. El recuerdo de Labordeta nos ayudará en esas luchas.

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