Otro gesto de señorío de Rafa Nadal y de ganas de evitar las polémicas que el horno no está para bollos, y tiempo habrá para recibir más honores que añadir a los que cuenta. El rector de la Universidad de las Islas Baleares quería hacer al tenista doctor honoris causa y se ha armado la gorda en las Illes. Rafa Nadal ha agradecido que se acordaran de él pero ha declinado recibir el honor académico porque hay división de opiniones y no quiere ofender. Cabe que sea un reconocimiento exagerado por la institución de que se trata, pero cabe que con su decisión se haya hecho más merecedor a recibirlo. Si hubiera un doctorado honoris causa a la humildad y al sentido común sería el primer candidato.
