Opinión

Ni pegado ni pagado

Probablemente le hubiera gustado lanzarle un aceitunazo en el ojo, pero con el cuidado que la cortesía parlamentaria exige, le espetó un cáustico: “Tanta paz lleve como descanso deja”. Teodoro García Egea (PP) se despedía así del que fuera su máximo contendiente del debate parlamentario, Pablo Iglesias. 

Pues sí, Pablenín, como así le bautizó el mordaz Jiménez Losantos por su apego a la doctrina y régimen comunista, se va. Pero no vuelve a la Colonia Fontarrón, donde vivía en aquel pisito donde se sentía “tan a gustito” y del que prometió no salir nunca para cuidarse del “peligro de los políticos que viven en chalés”. Vuelve a su flamante casoplón de Galapagar, convertido ahora en búnker anti escrache. Desde allí, pretenderá disputar la presidencia de la Comunidad de Madrid a una imparable Isabel Ayuso. Lo asombroso, es que este elemento vaya a sacar un solo voto. No salgo de mi asombro que, visto lo visto, tenga todavía capacidad de engañar a nadie.

Al que se le conoce por no haber pegado ni pagado, es decir, no haber pegado un palo al agua, ni haber pagado una nómina en su vida, se erigió como única fórmula posible para que la ultra izquierda llegara al poder en Madrid y salvarnos de “una derecha trumpista impulsada por enormes poderes económicos y mediáticos”. Pero al macho alfa de Podemos ya le han tomado la medida hasta los suyos. 

Parece que sus ex socias de Más Madrid están hartos de sus muestras de prepotencia cuando sugirió que él mismo encabezaría la candidatura conjunta cuando en realidad cuenta con a una fuerza tres veces menor. Al que acostumbra a situar a sus parejas en sus listas le han dicho que hasta aquí llegamos. Y se lo dice una mujer: “No podemos añadir más testosterona” … “Las mujeres estamos hartas de hacer el trabajo sucio”. ¿Están sugiriendo que Pablo Iglesias es un machista? Caramba.

Las hormonas del líder morado deben de estar en ebullición ya que ha iniciado la campaña con una fuerza inusitada. Si gobierna pretende llevar a la cárcel a Ayuso por “robar a manos llenas”. Uno no acaba de entender muy bien ¿A la cárcel Ayuso y a la calle los etarras? ¿Se entiende bien esto?

¿Se entiende también la sectaria visión de la Historia con la que insoportablemente blanquea todo lo que suene a comunismo? Donde hay comunismo acaba habiendo crímenes, odio, genocidio y violaciones masivas de los derechos humanos. Tiene el cuajo, junto con los socialistas de votar en contra de la resolución de la UE, que condena tanto el totalitarismo nazi como el comunista. 

Patético populista fanático que tendría que irse definitivamente a su casa, después de no haber pegado y pagado. Qué miseria.

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