El ser humano acostumbra a desear lo que no tiene o a ponderar por elevación los méritos en casa ajena mientras minusvalora los propios. Experimentados marmiteros socialistas continúan desconfiando de la mano de cartas de José Ramón Gómez Besteiro para ganar la partida de la Xunta de Galicia, quizá por las encuestas que se publican de la política estatal sin demasiado sentido para descifrar el futuro hasta que se acerque el momento de volver a las urnas dentro de cuatro años para elegir el Gobierno central. Si se atiende a esta inquietud, Besteiro se habría equivocado al rechazar ser ministro de Pedro Sánchez por la convicción de un futuro en la Xunta, según confesó el presidente del Gobierno en la inauguración de la Convención Política del PSdeG el sábado pasado en Santiago y confirmó después el aludido.
Experimentados marmiteros socialistas continúan desconfiando de la mano de cartas de José Ramón Gómez Besteiro para ganar la partida de la Xunta de Galicia...
La prudencia evita frustraciones en el caso de que no se cumplan las expectativas, pero también hay destacados marmiteros de las filas populares que opinan en voz baja que las opciones de reeditar la mayoría absoluta y continuar en San Caetano decrecen cada día que pasa con “el hombre anuncio” –maldad acuñada por el PPdeG por informar Besteiro a pie de obra de la apertura de un viaducto de la A-6 antes de que finalice el año y otras actuaciones del Gobierno central– en campaña mientras el presidente Alfonso Rueda sigue sin despejar sus dudas sobre la fecha más conveniente para sus intereses, que no son los de Núñez Feijóo ni pasan por la hiperventilación de la amnistía, aunque cuando se cosque podría ser tarde con Sánchez tocando a rebato en Galicia.
La prudencia evita frustraciones en el caso de que no se cumplan las expectativas, pero también hay destacados marmiteros de las filas populares que opinan en voz baja que las opciones de reeditar la mayoría absoluta y continuar en San Caetano decrecen cada día que pasa con “el hombre anuncio”...
Ayer sorprendió la llamada de un marmitero en las Cortes para chivar que en la comida de los empresarios gallegos en Madrid se habló en buen tono del diputado lucense, presidente de la Comisión de Transportes y candidato a la Xunta. “Hasta me pidieron a mí su teléfono”. Según el marmitero, en la opinión del capital influyó la reunión que Besteiro mantuvo a mediados de noviembre con la Mesa para o Desenvolvemento Renovable e Industrial de Galicia en la que señaló que “el PSOE es el promotor de las energías renovables, ya desde el inicio de las mismas, y son vitales para el objetivo de reindustrializar la comunidad”. El empresario gira con el viento, no por ideología.
