Opinión

El tute de un conselleiro

Dónde se habrá colocado Pepe Blanco? Decía que tenía mucho interés en saltar a la empresa privada", comentó en el abrevadero un cliente que leía en la prensa la remodelación del Gobierno de Núñez Feijóo. Hubo que explicarle que el exsecretario de Organización del PSOE y exministro de Fomento no había utilizado la puerta giratoria, sino que tomó el avión a Bruselas para pasar unos años en el balneario del Parlamento europeo. José Blanco sacha todos los días enviando notas de prensa, aunque no consigue que su actividad moje más allá de un breve en el mejor de los casos. Al menos lo intenta. 

Pero como está de moda la práctica del "tiro al político", expresión acuñada por el socarrón Pachi Vázquez, aunque a veces sobran los motivos, el cliente del bar añadió: "Llegar a conselleiro es como que te toque la lotería. Supongo que habrá codazos para conseguir el puesto". El diseñador Antón Lezcano realizó hace unos años una viñeta genial que abundaba en esa creencia. "Deus os cría e todos á Xunta", rezaba la ilustración. Será cuestión de prioridades personales, como la decisión de presentarse a delegado de clase en el colegio.

Imaginen que le ofrecen el cargo y antes de aceptar examina la agenda de un conselleiro. Por poner un ejemplo con la letra V y en el mismo día, te plantan un acto en Viveiro, otro en Vimianzo y acabas la jornada en Verín. Cuando regresas a casa, en la tele ya están machacando con la teletienda. Como tengas cativos, el día que puedes verlos te das cuenta de que ya no reconocen a ese señor que ven en la prensa y dicen que es su padre porque cuando no hay acto de Gobierno está programado uno del partido.

Cuentan que cuando Feijóo ganó sus segundas elecciones autonómicas quiso que uno de sus diputados más solventes saltase al Gobierno de la Xunta. Pero el tipo, listo y hábil, se las arregló para convencerlo de que su presencia era más necesaria que nunca en la Cámara gallega para atemperar la visceralidad de Beiras. Aunque su argumento estaba cargado de razón, lo cierto es que prefirió continuar en la reposada refriega parlamentaria antes que consumir los días por las 'corredoiras' de Galicia con el riesgo de recibir un capón verbal de la peña descontenta. Que es la mayoría.

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