Las alteraciones del clima y los cambios migratorios adelantan un mes la llegada de estas aves

‘Por Navidad, la cigüeña en A Limia verás’

Dos de las primeras cigüeñas en llegar a A Limia este año,  muy cerca de A Lagoa de Antela.  (Foto: Xesús Fariñas)
Aún no es San Blas (febrero), fecha tradicional del retorno de docenas de cigüeñas a A Limia, pero hace semanas muchas ya son visibles en nidos de A Lagoa. Las alteraciones del clima y, sobre todo, los cambios en los ciclos migratorios (las aves ya no bajan hasta África a final de verano) han provocado que estos bellos animales hagan coincidir su presencia con el níveo manto de la nieve. A Limia (sobre todo las areneras recuperadas de Sandiás) acogen ya la mayor población de cigüeñas de toda Galicia.
Alteraciones climatológicas igual a alteraciones del ciclo natural. No son predicciones, son evidencias. En A Limia, ya son decenas las cigüeñas que han retornado a sus nidos en zonas como A Lagoa de Antela desde hace semanas, un mes antes de cuando reza el tradicional adagio popular ‘Por San Blas (en febrero), la cigüeña verás’.

La causa de este adelanto del retorno de las aves es sencilla: todo está cambiando. Su migración obedece a patrones lógicos, cuando acaba de críar a sus retoños, en los meses de julio o agosto, empieza a formar bandas que hacia final de verano, desaparecen de A Limia hacia el Sur (preferentemente en Africa) donde pasan el invierno.

Cambio en la migración

Sin embargo, ahora esta tendencia se ha modificado. Según Perfecto García, del grupo ecologista MEL, ‘agora veñen moito antes, xa que en moitos casos non vaixan ata o Estreito de Xigraltar, quédanse na zona Centro da península onde hai grandes vertedeiros nos que se alimentan. E en moitos casos, en decembro, xa están de volta na Limia. Pode ser que as alteracións do cambio climático también teñan que ver con esta modificación de costumes’.

La cigüeña es un animal rústico que soporta bien el frío y sabe buscar alimento. Las características de A Lagoa la hacen ideal para ser su hogar. Zonas tranquilas, con abundante comida (anfibios e invertebrados) y árboles donde plantar sus nidos.

La cigüeña estuvo cerca de desaparecer de las tierras limianas en los años 80 por el furtivismo y la deforestación.

Sin embargo, desde los años 90, este ave ha experimentado un notable renacer en Sandiás o Xinzo, estimándose en cerca de 400 los ejemplares existentes, lo que convierte a A Limia en la zona gallega con mayor presencia de cigüeñas. La creación de humedales por la extracción de áridos y la recuperación medioambiental de las charcas ha sido determinante en ese asentamiento de esta especie.

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