El periodista y escritor Víctor Fernández investiga la relación entre los artistas con cartas, declaraciones y material inédito.
El periodista y escritor Víctor Fernández explora la relación entre Salvador Dalí y Pablo Picasso con el libro "Picasso y yo" (Elba), una colección de cartas, escritos de Dalí y declaraciones de testigos de primera mano, que incluye material inédito y una investigación de Fernández, que ha querido desmentir tópicos sobre los dos.
Fernández aborda la relación desde el punto de vista de Dalí, ya que todas las cartas menos una las firma él: "Solo existe una carta conocida de Picasso a Dalí --que hasta ahora era inédita-- pero en la correspondencia consta que hubo otros contactos", ha revelado este miércoles en rueda de prensa.
Dalí conoció a Picasso en abril de 1926 y del encuentro surgió una relación mezcla de admiración y rivalidad que, con el tiempo, transformó la fascinación del joven Dalí por el maestro Picasso en casi una obsesión, ha relatado.
En los años 30 se vieron con cierta asiduidad, a pesar de que no existe ninguna foto de los dos juntos, pero el tiempo y los ideales políticos los distanciaron: Picasso se acercó al comunismo mientras que Dalí se convirtió en el pintor de cámara del franquismo, aunque "no tomaba cartas en el asunto, e incluso llegó a ilustrar poemas de Mao", ha descrito.
A pesar de ello, Fernández ha hecho hincapié en desmentir que su relación fuera tan fría como se dice: "Picasso hizo casi de mecenas para Dalí, dándole dinero, pagándole un viaje y presentándole contactos, al menos hasta el 38", ha defendido.
"Posteriormente, hubo hasta tres intentos de volverse a ver y, aunque no llegaron a darse, había intención de reconciliarse", ha descrito el autor.
Basándose en las cartas, con fecha de hasta 1970, el autor ha observado que "no era un relación de 'colegueo', era más una obsesión de Dalí hacia Picasso (que llegó a calcar parte de sus cuadros y añadir la frase "¡Viva Picasso!"), al que debido a la distancia de edad veía como un padre", ha descrito.
Picasso, por su parte, lo veía probablemente como un discípulo y, aunque no era tan efusivo, mostró sentirse halagado por la admiración que le profesaba el joven e incluso confesó que Dalí era su favorito de la generación, ha apuntado.
Dos toros miuras
Fernández ha señalado la correspondencia como el material "que suele ser más inédito de este tipo de artistas, y es una alegría leer cartas con tanta información y que llevan tanto tiempo encerradas en un cajón", ha relatado.
"Investigar la relación era como torear con dos miuras, con dos pesos pesados, en un duelo de egos en el que no se sabe quien es más potente de los dos", ha valorado.
"Muchas de las cartas de Dalí son provocaciones, y a veces no debía saber qué responderle, pero consta que le hacían gracia", ha valorado el autor, que ha añadido que quizás en algún momento salen cartas de Picasso de alguna colección privada.
El alumbramiento del libro coincide con la exposición que el Museu Picasso de Barcelona dedica a los dos artistas, y Fernández ha apuntado que la complementa: "La exposición va a un nivel más científico, y mi labor ha sido más periodística".
"En los últimos años trabajando con Sabater, que fue secretario de Dalí, he podido acceder a tanta información que Dalí parece uno más de la familia", ha confesado Fernández, que ha añadido que llegó a Dalí desde Federico García Lorca y, de hecho, el autor dedicó un libro epistolario a ambos, "Querido Salvador, Querido Lorquito".
