Will Smith vuelve a salvar a la humanidad en la superproducción 'Soy leyenda'

El actor norteamericano Will Smith
El actor norteamericano Will Smith vuelve a salvar a la humanidad en la superproducción 'Soy leyenda', una película 'apocalíptica diferente', según dijo hoy en la presentación del film en Madrid. Smith encarna a Robert Neville, único superviviente en la ciudad de Nueva York de una plaga mundial causada por un virus.
En 2012, tres años después de la pandemia, vive rodeado de 'infectados' convertidos en híbridos entre vampiros y zombis y pasa el día buscando comida y suministros junto a su perra Sam. La única misión que le queda es encontrar el modo de revertir el virus utilizando sus conocimientos como científico militar y con la materia prima de su propia sangre inmune.

El largometraje está basado en la novela homónima de 1964 del escritor de ciencia ficción Richard Matheson. Según Smith, han intentado 'ser fieles' a este 'gran libro', pero aportando su 'creatividad'. 'Creo que hemos hecho justicia a la obra original', afirmó. Las imágenes más 'espectaculares' muestran una 'metrópolis hormigueante' como Nueva York completamente vacía, algo 'nunca visto hasta ahora' en el cine. Para comprender la soledad, el protagonista llegó a entrevistarse con presos.

'Soy leyenda' explora terrenos limítrofes entre ciencia, razón y religión: 'No sabemos cuál es la línea que separa a los científicos de Dios. Neville piensa en sí mismo como un dios, se cree Noé porque su responsabilidad es volver a crear al mundo, pero desde la ciencia'. La novela de Matheson plantea 'ideos judeocristianas básicas' según Smith, como 'comprometer el alma con Jesús'. 'Sentimos que esto se alejaba de nuestras ideas, más cercanas a la espiritualidad, un concepto que va más allá de las religiones'. Por ello, el antagonista pasa de ser el vampiro de la obra original al que hay que combatir con 'crucifijos y ajos' a un ser humano infectado por un virus. En ambos casos, la idea central es 'cómo el ser humano reacciona ante lo desconocido', dijo Smith.

PREMIO DIFÍCILES POR LA 'APARIENCIA'

A la hora de optar a premios, el intérprete sabía que la 'apariencia' del film dificulta esta posibilidad, aunque confía en que sea lo 'suficientemente diferente'. El equipo creativo ha puesto el 'enfoque' en aspectos menos habituales en superproducciones como 'el guión dramático o la interpretación'. Smith pasó dos semanas solo en Nueva York para prepararse para el papel. Conseguir una 'sensación de soledad' en esta ciudad es 'difícil porque siempre hay pitidos o neones'. 'Siempre hay algo fuera que no nos permite pensar que está pasando en nuestra cabeza', señaló.

Este proyecto es especial para el actor, ya que su propia hija Willow, de 7 años, tiene un papel. 'Me dijo que el papel estaba hecho para ella', dijo entre risas. Para un padre, es 'increíble' que un hijo quiera 'hacer lo mismo que tú' ya que 'es lo que mejor le puedes enseñar'. Smith ha fundado una escuela junto con su mujer, la también actriz Jada Pinkett Smith, porque tienen 'ideas muy específicas' acerca de la educación. 'Las escuelas norteamericanas están diseñadas para crear una sociedad industrial, de gente trabajando en fábricas'.

El actor se mostró ambicioso: 'Quiero crear un modelo educativo que revolucione la educación en Estados Unidos y, si puede ser, en el mundo'. Es una reacción contra los 'conceptos individualistas' que guiaron su educación y en los que creyó 'durante muchos años'. Quiere que su nueva escuela se base en formar 'ciudadanos del mundo' con una 'enseñanza colectiva' que gire en torno a 'lo básico, la lectura, la escritura, la aritmética'.

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