El futbolista del Villarreal Cani apuntó que espera más de un partido de sanción por haberle lanzado una botella al entrenador del Real Madrid, Jose Mourinho, al que no llegó a dar, porque el club castellonense no tiene el peso de otros.
La acción se produjo cuando el técnico portugués se metió en la zona técnica del Villarreal a festejar el cuarto gol del Madrid, lo que motivó el enfado del banquillo castellonense, que lo tomó con una provocación.
'Fue una tontería y debería ser más una anécdota que una noticia. Lo que pasa es que somos el Villarreal y puede que por eso me caiga más de un partido ya que no tenemos el peso de otros equipos', explicó el futbolista aragonés.
'No debí haberle lanzado nada, pero si sirve, he de decir que no lo hice con la intención de agredirle, sino con la idea que se marchara de allí para que supiera que no nos parecía bien lo que estaba haciendo y que ése no era su sitio', añadió.
Cani insistió en que nadie resultó dañado y añadió que si hubiera sido así sí que merecería sanción. 'Pero viendo lo que ha pasado, no entendería una sanción por eso'.
Relató que estaban haciendo un partido bueno y que por unas acciones, 'primero del Madrid y después del árbitro', acabaron perdiéndolo, lo que provocó que estuvieran 'más nerviosos, ya que el partido se escapaba.
'Fue una tontería y debería ser más una anécdota que una noticia. Lo que pasa es que somos el Villarreal y puede que por eso me caiga más de un partido ya que no tenemos el peso de otros equipos', explicó el futbolista aragonés.
'No debí haberle lanzado nada, pero si sirve, he de decir que no lo hice con la intención de agredirle, sino con la idea que se marchara de allí para que supiera que no nos parecía bien lo que estaba haciendo y que ése no era su sitio', añadió.
Cani insistió en que nadie resultó dañado y añadió que si hubiera sido así sí que merecería sanción. 'Pero viendo lo que ha pasado, no entendería una sanción por eso'.
Relató que estaban haciendo un partido bueno y que por unas acciones, 'primero del Madrid y después del árbitro', acabaron perdiéndolo, lo que provocó que estuvieran 'más nerviosos, ya que el partido se escapaba.
