Una cerveza, un agua o un vino para celebrarlo.
En Galicia sí hay músculo empresarial y también hay gente que cree que desde este 'bonito culo del mundo', como definió a esta tierra el escritor Manuel Rivas, se puede crear riqueza, puestos de trabajo y encarar el futuro con optimismo. En hora y media en un desayuno informativo y alejado de la costumbre del sector empresarial gallego de permanecer en un segundo plano, Ignacio Rivera, consejero delegado de Hijos de Rivera, empresa centenaria que produce la cerveza Estrella Galicia, las marcas de agua Cabreiroá y Cuevas y también el vino Ponte da Boga de la denominación de origen Ribeira Sacra, mostró su confianza en el crecimiento del negocio que fundo su bisabuelo.
Hijos de Rivera cerrará el ejercicio 2012 con una facturación de 205 millones de euros y espera alcanzar en el años 2015 los '250 millones de euros' con una producción de '250 millones de litros'. En la actualidad la empresa cuenta con 700 empleados directos, de los cuales el 90% de la plantilla son puestos de trabajo indefinidos' y otros 700 indirectos.
Según afirmó ante el interrogatorio de los periodistas a calzón quitado, Ignacio Rivera, confía en que la nueva planta en el Polígono de Sabón en A Coruña le permita duplicar la producción. En la actualidades líder indiscutible en el mercado gallego, cuenta con una cuota del 3,5% del mercado nacional, en el que vende una de cada tres botellas que produce, pero se espera que en el año 2015 alcance el 50% de la fabricación.
Ignacio Rivera anunció inversiones por importe de 80 millones hasta 2015, que se suman a los 150 millones acometidos durante los últimos seis años. El consejero delegado de Hijos de Rivera también envió un mensaje de 'confianza' y de optimismo en tiempos de crisis y, sobre todo, recordó el enorme potencial del campo gallego. La internacionalización y las oportunidades en la distribución, con el mercado brasileño en el punto de mira desde donde espera también producir para conquistar el mercado de América Latina, hace que esta empresa fundada en 1906 por José Rivera Corral, emigrante retornado de México, ver luces en época de sombras.
Hijos de Rivera cerrará el ejercicio 2012 con una facturación de 205 millones de euros y espera alcanzar en el años 2015 los '250 millones de euros' con una producción de '250 millones de litros'. En la actualidad la empresa cuenta con 700 empleados directos, de los cuales el 90% de la plantilla son puestos de trabajo indefinidos' y otros 700 indirectos.
Según afirmó ante el interrogatorio de los periodistas a calzón quitado, Ignacio Rivera, confía en que la nueva planta en el Polígono de Sabón en A Coruña le permita duplicar la producción. En la actualidades líder indiscutible en el mercado gallego, cuenta con una cuota del 3,5% del mercado nacional, en el que vende una de cada tres botellas que produce, pero se espera que en el año 2015 alcance el 50% de la fabricación.
Ignacio Rivera anunció inversiones por importe de 80 millones hasta 2015, que se suman a los 150 millones acometidos durante los últimos seis años. El consejero delegado de Hijos de Rivera también envió un mensaje de 'confianza' y de optimismo en tiempos de crisis y, sobre todo, recordó el enorme potencial del campo gallego. La internacionalización y las oportunidades en la distribución, con el mercado brasileño en el punto de mira desde donde espera también producir para conquistar el mercado de América Latina, hace que esta empresa fundada en 1906 por José Rivera Corral, emigrante retornado de México, ver luces en época de sombras.
