Desde el año 1980 no se adoptaba una decisión de estas características, que suscitó el rechazo de los sindicatos y la izquierda

El Gobierno congelará en 641 euros el salario mínimo para el año 2012

Fátima Báñez, con Ignacio Fernández Toxo. (Foto: JUANJO MARTÍN)
Desde 1980 el salario mínimo interprofesional (SMI) no se vio congelado. Pero no será así para el próximo 2012, ya que el Gobierno ha comunicado a los sindicatos su intención de congelar dicho salario en los actuales 641,40 euros mensuales a causa de la 'coyuntura económica en general'. El nuevo Gobierno de Mariano Rajoy tiene previsto congelarlo a través de un decreto-ley de medidas económicas que el Consejo de Ministros espera aprobar este viernes. Más tarde, el Congreso celebrará, el próximo 11 de enero, un pleno extraordinario en el que debatirá la convalidación de este decreto-ley.
Tras subir un 1,3% en 2011, el SMI quedó fijado en 21,38 euros al día o 641,40 euros al mes y en cómputo anual en ningún caso por debajo de los 8.979,60 euros. Para los trabajadores eventuales y temporeros cuyos servicios a una misma empresa no excedan de 120 días, el salario mínimo se situó en 30,39 euros por jornada. Los empleados del hogar, por otro lado, tenían una cuantía establecida de 5,02 euros por hora trabajada.

El Gobierno, a través del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, emitió una carta en la que informó a los sindicatos CC.OO. y UGT de su intención de congelar el SMI para el próximo año debido a la situación de crisis económica.


RECHAZO SINDICAL

La respuesta de los sindicatos, sin embargo, no se hizo esperar, pues los secretarios de Acción Sindical de UGT y CC.OO., Toni Ferrer y Ramón Górriz, ya remitieron una carta a la aún secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, en la que 'rechazan' la congelación del SMI para 2012. Ambas centrales recuerdan que el SMI fue perdiendo peso sobre el salario medio a partir de 2007, fecha en la que alcanzó su mayor peso relativo (41,5%) y que cayó progresivamente desde ese año hasta el 41% en 2010 y 2011. Además, reseñan una pérdida del poder de compra del salario mínimo del 0,3% en 2010 y del 2% en 2011. De este modo, piden al Gobierno que el SMI recupere el poder de compra perdido en 2010 y 2011 y que mantenga su capacidad adquisitiva en 2012.

El SMI no subió menos de un 4% entre 2001 y 2009, pero sólo experimentó subidas del 1,5% y del 1,3% en 2010 y 2011, frente a los crecimientos del IPC del 1,8% y del 3,3% en estos años. El resultado ha sido un retroceso real del poder de compra del 0,3% en 2010 y del 2% este año.

Según los cálculos de UGT y CC.OO., el SMI es percibido por unos 183.000 trabajadores. De esta forma, el salario mínimo español es uno de los más bajos de los países de la Unión Europea-15 que lo tienen establecido en su ordenamiento jurídico con cobertura general, tanto en términos absolutos como en paridad de poder de compra, solo por encima de Portugal.


CRÍTICAS DE LA IZQUIERDA

Ante estas intenciones de congelar el SMI, el exministro de Trabajo e Inmigración y diputado socialista Valeriano Gómez expresó, su 'profundo desacuerdo' con esta decisión, la cual tildó de 'regresiva, injusta' y 'ni mucho menos razonable'. En este sentido, estimó que la medida, que afectará a 1,5 millones de personas con los sueldos más bajos, demuestra que el PP 'vuelve a imprimir una política de recorte'.

Otros diputados socialistas arremetieroncontra la decisión a través de 'Twitter', como el secretario general del Grupo, Eduardo Madina, el burgalés Luis Tudanca, la tinerfeña Patricia Hernández y el soriano Félix Lavilla.La probable candidata a liderar el PSOE, Carme Chacón señaló que 'no es una medida técnica, es la sensibilidad social del nuevo Gobierno' y añadió 'que tomen nota en Andalucía'.

También los portavoces de IU e ICV en el Congreso, José Luis Centella y Joan Coscubiela, han asegurado este miércoles que si el Gobierno 'consuma su amenaza' de congelar el SMI en 2012 estará cometiendo una 'auténtica aberración' que supone una 'declaración de guerra'. Ambos diputados han asegurado, en rueda de prensa, que el Gobierno debe cumplir los compromisos incluidos en la Carta Social Europea que España firmó en 1980 y en la que se comprometía a fijar el SMI en el 80% del salario medio.

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