Cae una red de traficantes de droga que operaba en el Maresme (Barcelona) y La Selva (Girona)

La Policía Nacional ha desarticulado una red criminal integrada por 15 personas, entre ellas un policía local de Blanes, presuntamente dedicadas al tráfico de drogas, los robos en viviendas y las estafas que actuaba en la zona del Maresme (Barcelona) y La Selva (Girona), según han informado fuentes policiales.
El líder de esta red era el encargado de buscar contactos para la venta de drogas, sustancias dopantes como la nandrolona y anabolizantes en gimnasios y otros establecimientos.
Además, planificaba los diferentes robos con fuerza y se encargaba de buscar a colaboradores para dar salida a los efectos robados y distribuir la droga.

El policía local arrestado facilitaba información sobre control de matrículas de vehículos sospechosos para eludir la posible vigilancia policial y otras gestiones relativas a las investigaciones de los implicados.

Tres de los detenidos, personas de confianza del máximo responsable del grupo, tenían la misión de ocultar la droga, distribuirla a los clientes y almacenar efectos procedentes de robo y el dinero obtenidos de ambas funciones.

Entre los integrantes de la red se encontraban otras cuatro personas, dos de ellas padre e hijo, que ejecutaban los robos en domicilios y preparaban toda la infraestructura logística de los mismos, tanto vehículos, herramientas y dispositivos de vigilancia, como la posterior venta de los efectos robados a posibles compradores.

La organización contaba con una infraestructura especializada en cometer estafas mediante el método del 'nazareno', que consiste en realizar compras de diferentes productos que después no pagaban, tras ganarse la confianza de los proveedores.

De esta actividad ilícita se encargaban dos de los detenidos quienes utilizaban para ello una empresa de Blanes, actuando en connivencia con el gerente, y con este método llegaron a estafar diversas empresas una cantidad superior a los 600.000 euros.

Además contaban con el apoyo de varios colaboradores cuyo cometido era recoger la mercancía en las compañías de transportes y darles posteriormente salida.

Los investigadores registraron simultáneamente siete domicilios en Santa Susanna, Calella y Blanes, en los que intervinieron cuatro kilos de marihuana seca, 36 plantas y esquejes de plantas de marihuana, 30 gramos de cocaína, balanzas de precisión y sustancias para el corte.

También decomisaron una pistola automática Norinko del calibre 45 con 22 proyectiles y dos fundas, dos pistolas de fogueo, 10.497 euros en efectivo y 11 ampollas de nandrolona, 24 ampollas de Primbolon, seis de Winstrol Depot, cuatro de Sustanon y 60 de Dyma-Burn.

Los policías también recuperaron nueve portátiles, un navegador, tres smartphones, nueve consolas de videojuegos, una cámara fotográfica, 3 cajas de ron, un jamón, 17 cajas con discos abrasivos radiales y calzado.

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