María José Campanario y su madre, Remedios Torres, defendieron durante la celebración del juicio de la Operación Karlos que su intención era arreglar la situación de incapacidad que sufría Remedios Torres y que desconocían que lo que se estaba tramitando era una incapacidad laboral. Por contra, en la sesión décima del juicio, una médico que declaró como testigoaseguró, en reiteradas ocasiones, que fue la propia Remedios Torres la que le dijo que trabajaba como limpiadora en una inmobiliaria.
La médico relató que la paciente llegó con un dictamen de incapacidad permanente propuesto por el inspector médico Francisco Casto Pérez Lara (uno de los principales acusados) y añadió que le llamó la atención que en la propuesta realizada repetía 'hasta cuatro o cinco veces' que se trataba de un 'accidente no laboral'. En este sentido, explicó que para otorgar una pensión por una enfermedad común, por un accidente no laboral, se requiere de un periodo de cotización, mientras que si es por un accidente laboral, no es necesario.
