El 'paseíllo' de la infanta, aún pendiente de la decisión del juez

Representantes de la seguridad de la Casa Real, la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local de Palma se reunieron ayer en la capital balear para preparar el despliegue del próximo 8 de febrero con ocasión de la declaración como imputada en el caso Nóos de la infanta Cristina. La junta de seguridad se celebró para establecer los detalles del dispositivo y coordinar la actuación de los diferentes cuerpos que intervendrán en el operativo.
En el encuentro se abordaron las medidas de protección del entorno del edificio de los juzgados de Vía Alemania de Palma, donde doña Cristina está citada para declarar ante el juez José Castro a las 10.00 horas.

Para ello, se determinó qué calles se cortan al tráfico y en qué puntos se restringe el movimiento de viandantes, así como dónde se permite la celebración de concentraciones convocadas con ocasión de la comparecencia judicial de la hija del Rey.

En la reunión se trató también el dispositivo necesario para garantizar la seguridad de la infanta en su desplazamiento hasta los juzgados cuando comparezca y también el movimiento entre el aeropuerto y el lugar en el que se aloje si se traslada hasta Mallorca antes del 8 de febrero. Cuando declaró Iñaki Urdangarin en febrero de 2012 y 2013 se cerró al tráfico un carril de la avenida Vía Alemania y otras dos calles contiguas al edificio de los juzgados.


SIN TRATO DE FAVOR

Además, ayer el secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, señaló una vez más que debe quedar 'claro' que no hay 'ni tratos de favor ni papeles activos, ni a favor ni en contra' de la infanta Cristina por parte de la Agencia Tributaria con respecto a la investigación del caso Nóos.

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