El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el ministro de Fomento, José Blanco, se reúnen hoy en Madrid para pasar examen al Pacto del Obradoiro, el gran acuerdo sellado por ambos dirigentes en la capital gallega en julio de 2009 para impulsar la llegada del AVE a Galicia en 2015 y excluir la conexión ferroviaria de alta velocidad de la trifulca política.
Este objetivo se logró el pasado año, en el que el propio Feijóo admitió que Fomento había 'cumplido' con lo establecido, pero la paz en este ámbito entre los ejecutivos autonómico y estatal -con una relación marcada por la confrontación- tampoco ha podido mantenerse este 2010, sobre todo desde que Xunta y el PP empezaron a denunciar a diario la falta de cumplimiento del acuerdo.
De hecho, a menos de un mes para que concluya el año, el conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras de la Xunta de Galicia, Agustín Hernández, advirtió en el último pleno de la Cámara autonómica de que los compromisos adquiridos para 2010 sólo se cumplieron 'en un 3,4 por ciento'.
A la espera de las conclusiones del encuentro que se desarrollará hoy, lo cierto es que el Ministerio de Fomento ha emprendido una gira por Estados Unidos y China con el reto de captar fondos con los que financiar, a través de la fórmula público-privada, obras del Plan Extraordinario de Infraestructuras Terrestres, entre las que se encuentra la conexión del AVE entre Galicia y Madrid.
Mientras, el Gobierno gallego se mantiene 'expectante' y sus dirigentes insisten públicamente en que esperan que el Gobierno central 'cumpla'.
De hecho, a menos de un mes para que concluya el año, el conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras de la Xunta de Galicia, Agustín Hernández, advirtió en el último pleno de la Cámara autonómica de que los compromisos adquiridos para 2010 sólo se cumplieron 'en un 3,4 por ciento'.
A la espera de las conclusiones del encuentro que se desarrollará hoy, lo cierto es que el Ministerio de Fomento ha emprendido una gira por Estados Unidos y China con el reto de captar fondos con los que financiar, a través de la fórmula público-privada, obras del Plan Extraordinario de Infraestructuras Terrestres, entre las que se encuentra la conexión del AVE entre Galicia y Madrid.
Mientras, el Gobierno gallego se mantiene 'expectante' y sus dirigentes insisten públicamente en que esperan que el Gobierno central 'cumpla'.
