El secretario general del PSdeG y presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, advirtió hoy de que el galleguismo no es hacer abstracciones falsas, ni ecuaciones ni tiras y aflojas falsos con el Gobierno del Estado, tras lo cual concluyó que el galleguismo real y pleno consiste en hacer de la comunidad un país cada día mejor para sus ciudadanos.
En un mitin de campaña en Santiago de Compostela, el dirigente socialista incidió en que galleguismo y socialismo es hacer de Galicia un país solidario y cooperativo con el resto del España y de ciudadanos cada vez más libres e iguales. Además, y sin citar en ningún momento a ningún partido, incidió en que galleguismo no es hacer solitarios en política.
Cuando queda una semana para decidir el futuro de España, Touriño se dirigió de manera muy especial a las mujeres de Galicia, a las que pidió que voten al Gobierno y al presidente que puso en marcha la Ley de igualdad y en contra del partido que votó en contra de esta normativa, en alusión al PP.
Al igual que ayer hizo con los jóvenes en O Barco, en esta ocasión el líder socialista se centró en las mujeres y también les pidió su apoyo por el compromiso de José Luis Rodríguez Zapatero para poner fin a la lacra de la violencia de género y por poner en marcha la ley de dependencia, ya que las mujeres son a las que mayoritariamente les toca dejar esfuerzo y horas en atender a los dependientes.
Ante el medio millar de asistentes al mitin, entre los que había numerosos altos cargos de la Xunta, Touriño reclamó también específicamente el voto de los ciudadanos sensatos y moderados que saben que la política no pasa por la confrontación, por la división, por crear cada día alarma y desconfianza ni por utilizar de manera indecente la lucha contra el terrorismo para el rédito electoral.
CAPITAL CULTURAL.
En la capital gallega y acompañado por el ministro de Cultura, César Antonio Molina, Touriño no hizo referencia expresa al proyecto de la Cidade da Cultura, aunque sí apostó por que Santiago siga siendo el motor del cosmopolitismo y la punta de lanza cultural de Galicia y auguró que con Zapatero en La Moncloa y Molina de ministro la ciudad será una capital permanente de la cultura europea.
Asimismo, apostó por convertir Santiago en el epicentro de las comunicaciones de Galicia y se refirió a la puesta en marcha de la Autovía Santiago-Brión; a la autovía a Teo, que en apenas unos meses será puesta en servicio; a la ejecución de la Autovía Santiago-Lugo; y al compromiso de Zapatero de ampliar la AP-9, que permitirá afrontar el Xacobeo 2010 sin atascos.
ESPAÑA NEGRA.
Por su parte, el ministro de Cultura y cabeza de lista del PSOE al Congreso por A Coruña, César Antonio Molina, aseguró que le cuesta entender en qué país vive el PP cuando pinta una España negra, rancia y que, afortunadamente, quedó atrás hace varias décadas. Para él, la realidad actual es la de un pueblo que crece y que se encuentra entre las ocho economías más fuertes del mundo.
No podemos consentir que la derecha española gobierne, enfatizó Molina, que criticó duramente al PP. Así, le acusó de haber denigrado a la gente de la cultura, a los creadores, a los intelectuales, a los profesores de universidad, a los alumnos, a empresarios y a trabajadores. Me pregunto qué le hicimos al PP para que siempre esté dudando de nuestra capacidad, añadió.
Frente a ello, el candidato socialista aseguró que el Gobierno de Zapatero es de fiar y ha convertido España en un país que es admirado en muchos países. Necesitamos un Gobierno socialista otros cuatro años, incidió, para así poder seguir avanzando en educación, cultura, solidaridad, igualdad y justicia social.
PARTICIPACION FUNDAMENTAL.
Por su parte, el número dos de la lista socialista al Congreso por A Coruña, Ceferino Díaz, enfrentó el modelo de Rajoy y sus mariachis, Acebes y Zaplana y la niña Esperancita con la posibilidad de seguir avanzando con Zapatero y sus tres ministros gallegos y abogó por mantener el binomio Zapatero-Touriño porque fue positivo para Galicia.
Votemos todos, aunque les duela, enfatizó el candidato del PSOE.
En esa misma línea, el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, también hizo un llamamiento masivo al voto y trasladó a los simpatizantes socialistas que si el 9 de marzo la participación supera el 70 por ciento, ya podrán empezar a celebrar la victoria.
Sánchez Bugallo también hizo referencia en su discurso al grupo de 20 trabajadores de la mina de Serrabal que se manifestó en el exterior del Palacio de Congresos, de los que dijo que, sin estar de acuerdo con sus reivindicaciones de que se varíe el trazado del AVE para no afectar a la explotación, es de agradecer su constancia.
Para el regidor compostelano, esta protesta transmite a los socialistas una buena señal para los socialistas de cara a la jornada electoral, porque nadie peregrina a los santos que no funcionan. Además, Bugallo también hizo referencia a la negociación del Gobierno con ETA, al asegurar que aunque el resultado no fue óptimo, fue francamente bueno porque la banda armada salió más debilitada y más aislada.
Cuando queda una semana para decidir el futuro de España, Touriño se dirigió de manera muy especial a las mujeres de Galicia, a las que pidió que voten al Gobierno y al presidente que puso en marcha la Ley de igualdad y en contra del partido que votó en contra de esta normativa, en alusión al PP.
Al igual que ayer hizo con los jóvenes en O Barco, en esta ocasión el líder socialista se centró en las mujeres y también les pidió su apoyo por el compromiso de José Luis Rodríguez Zapatero para poner fin a la lacra de la violencia de género y por poner en marcha la ley de dependencia, ya que las mujeres son a las que mayoritariamente les toca dejar esfuerzo y horas en atender a los dependientes.
Ante el medio millar de asistentes al mitin, entre los que había numerosos altos cargos de la Xunta, Touriño reclamó también específicamente el voto de los ciudadanos sensatos y moderados que saben que la política no pasa por la confrontación, por la división, por crear cada día alarma y desconfianza ni por utilizar de manera indecente la lucha contra el terrorismo para el rédito electoral.
CAPITAL CULTURAL.
En la capital gallega y acompañado por el ministro de Cultura, César Antonio Molina, Touriño no hizo referencia expresa al proyecto de la Cidade da Cultura, aunque sí apostó por que Santiago siga siendo el motor del cosmopolitismo y la punta de lanza cultural de Galicia y auguró que con Zapatero en La Moncloa y Molina de ministro la ciudad será una capital permanente de la cultura europea.
Asimismo, apostó por convertir Santiago en el epicentro de las comunicaciones de Galicia y se refirió a la puesta en marcha de la Autovía Santiago-Brión; a la autovía a Teo, que en apenas unos meses será puesta en servicio; a la ejecución de la Autovía Santiago-Lugo; y al compromiso de Zapatero de ampliar la AP-9, que permitirá afrontar el Xacobeo 2010 sin atascos.
ESPAÑA NEGRA.
Por su parte, el ministro de Cultura y cabeza de lista del PSOE al Congreso por A Coruña, César Antonio Molina, aseguró que le cuesta entender en qué país vive el PP cuando pinta una España negra, rancia y que, afortunadamente, quedó atrás hace varias décadas. Para él, la realidad actual es la de un pueblo que crece y que se encuentra entre las ocho economías más fuertes del mundo.
No podemos consentir que la derecha española gobierne, enfatizó Molina, que criticó duramente al PP. Así, le acusó de haber denigrado a la gente de la cultura, a los creadores, a los intelectuales, a los profesores de universidad, a los alumnos, a empresarios y a trabajadores. Me pregunto qué le hicimos al PP para que siempre esté dudando de nuestra capacidad, añadió.
Frente a ello, el candidato socialista aseguró que el Gobierno de Zapatero es de fiar y ha convertido España en un país que es admirado en muchos países. Necesitamos un Gobierno socialista otros cuatro años, incidió, para así poder seguir avanzando en educación, cultura, solidaridad, igualdad y justicia social.
PARTICIPACION FUNDAMENTAL.
Por su parte, el número dos de la lista socialista al Congreso por A Coruña, Ceferino Díaz, enfrentó el modelo de Rajoy y sus mariachis, Acebes y Zaplana y la niña Esperancita con la posibilidad de seguir avanzando con Zapatero y sus tres ministros gallegos y abogó por mantener el binomio Zapatero-Touriño porque fue positivo para Galicia.
Votemos todos, aunque les duela, enfatizó el candidato del PSOE.
En esa misma línea, el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, también hizo un llamamiento masivo al voto y trasladó a los simpatizantes socialistas que si el 9 de marzo la participación supera el 70 por ciento, ya podrán empezar a celebrar la victoria.
Sánchez Bugallo también hizo referencia en su discurso al grupo de 20 trabajadores de la mina de Serrabal que se manifestó en el exterior del Palacio de Congresos, de los que dijo que, sin estar de acuerdo con sus reivindicaciones de que se varíe el trazado del AVE para no afectar a la explotación, es de agradecer su constancia.
Para el regidor compostelano, esta protesta transmite a los socialistas una buena señal para los socialistas de cara a la jornada electoral, porque nadie peregrina a los santos que no funcionan. Además, Bugallo también hizo referencia a la negociación del Gobierno con ETA, al asegurar que aunque el resultado no fue óptimo, fue francamente bueno porque la banda armada salió más debilitada y más aislada.