Estamos en Año Santo, y 2022 será resanto. Pero hasta el próximo domingo, los caminos gastronómicos apuntan todos a Ourense. Al gran salón de la gastronomía y el turismo gastronómico que es Xantar. Este año se ha reducido el número de restaurantes que participan. Son ocho, por razones sanitarias. Pero la representación de nuestra cocina está en buenas manos. Domingos González, el jefe de cocina del hotel Caldaria de Lobios, es el responsable de los menús del restaurante que representa a Arnoia. Es un gran conocedor de las cocinas de los caminos. Al frente de las propuestas del Inorde, Carlos Parra, un histórico de Xantar que ya ha representado prácticamente a todas las comarcas ourensanas, ahora afronta el reto de hacer de la propuesta del Inorde unos menús que las representen a todas. O Irixo nos trae los lácteos de su cooperativa de Santa Mariña de Loureiro y unos menús en los que se puede viajar a la cocina tradicional de esa tierra de frontera con la más interior de las comarcas de la provincia de Pontevedra, que luego tiene su costa representada por A Guarda.
De Ourense capital, dos restaurantes, el que representa al Concello, con los pinchos ganadores en el concurso Sabores de Ourense y el de A Antiga Leitería de A Ponte, que ha sabido conjugar los sabores tradicionales y concepciones más contemporáneas.
La reducción de número de restaurantes ha dejado fuera algunas experiencias gastronómicas con arraigada presencia en Xantar, como Castilla y León. Portugal, presente desde febrero de 2000, está representado por el restaurante de Vila Real, con bacalao y ternera de raza Maronesa, una de las autóctonas de la región Norte. Y de las gallegas y su gastronomía se ocupa el restaurante de Boaga, la Federación de Razas Autóctonas de Galicia. En lo que a las cosas de comer, entre los restaurantes y los stands están todos los sabores del noroeste, desde el Duero hasta el Eo.
