El interior de la iglesia de Bousés (Oímbra) está ocupado por andamios que fueron instalados hace cuatro meses para el inicio de unas obras de restauración de dos retablos del siglo XVII, presupuestadas por Cultura con 59.000 euros, que no llegaron a desarrollarse pues Patrimonio las paralizó. Las imágenes de los santos también están fuera de su lugar, en el suelo. Los vecinos están indignados, un bautizo ya tuvo que celebrarse fuera del templo y el Concello realiza gestiones para que se retomen las obras.
El pasado 31 de julio, Patrimonio paralizó el inicio de las obras de restauración de dos retablos del siglo XVII de la iglesia de Bousés (Oímbra). Desde entonces, el interior del templo permanece ocupado por andamios que cubren sus altares y las imágenes religiosas fuera de su lugar, en el suelo.
Los vecinos de esta localidad, en la que residen 200 familias, están indignados por el tiempo transcurrido y la incomodidad que supone el estado del templo a la hora de celebrar los actos religiosos. Si temos que movilizarnos, o faremos. Non é de recibo que despois de catro meses as obras estén sin executar. Ninguén deu unha explicación á parroquia, apuntan.
Para las misas, el párroco emplea una mesa asentada sobre bloques como altar. Nun principio habíamos optamos por utilizar o tanatorio para os cultos, pero é moi pequeno e tivemos que seguir usando a igrexa. Cada vez que entramos nela nos cae o alma os pés pois ten moito valor patrimonial e os santos siguen no chan con risco de sufrir deterioro, lamentan.
Bautizo fuera del templo
El único bautizo que se celebró en la localidad este año, el pasado mes de julio, se realizó fuera del templo. Optamos por hacerlo en el exterior porque tal y como está la iglesia no iba a ser lucido. Al final salió todo muy bien, quedamos contentos pues incluso fue original, pero es una lástima que la iglesia siga aguardando por las obras. No es jus to, comenta Mónica Fernández, vecina de la localidad. Los vecinos de Bousés señalan que a nós danos igual o problema que teña Patrimonio, a obra estaba adxudicada por Cultura con 59.000 euros. Costounos moito, tanto os veciños como o párroco, conseguir que se arranxaran os retablos e, agora, estamos ca igrexia patas arriba.
Además, ponen de manifiesto que la iglesia ten moita importancia para os veciños e está recoñecida como unha xoia do patrimonio eclesiástico da provincia de Ourense. La reivindicación es participada por a xente nova, que está tomando cartas no asunto e non descartamos facer algún tipo de acto de protesta pois estamos desesperados, concluyen.
Gestiones del Concello ante la Xunta
El alcalde, Alfonso Villarino, afirma que la obra de restauración de los dos retablos no es del Concello, que fue adjudicada por la Consellería de Cultura y que Patrimonio la paralizó ó comprobar que os traballos da empresa adxudicataria non se axustaban as directrices que tiña que seguir para a restauración. No obstante, asevera que está realizando gestiones ante Patrimonio con el fin de que se retomen cuanto antes. Estamos tratando de que lle den unha solución, aclara.
Los vecinos de esta localidad, en la que residen 200 familias, están indignados por el tiempo transcurrido y la incomodidad que supone el estado del templo a la hora de celebrar los actos religiosos. Si temos que movilizarnos, o faremos. Non é de recibo que despois de catro meses as obras estén sin executar. Ninguén deu unha explicación á parroquia, apuntan.
Para las misas, el párroco emplea una mesa asentada sobre bloques como altar. Nun principio habíamos optamos por utilizar o tanatorio para os cultos, pero é moi pequeno e tivemos que seguir usando a igrexa. Cada vez que entramos nela nos cae o alma os pés pois ten moito valor patrimonial e os santos siguen no chan con risco de sufrir deterioro, lamentan.
Bautizo fuera del templo
El único bautizo que se celebró en la localidad este año, el pasado mes de julio, se realizó fuera del templo. Optamos por hacerlo en el exterior porque tal y como está la iglesia no iba a ser lucido. Al final salió todo muy bien, quedamos contentos pues incluso fue original, pero es una lástima que la iglesia siga aguardando por las obras. No es jus to, comenta Mónica Fernández, vecina de la localidad. Los vecinos de Bousés señalan que a nós danos igual o problema que teña Patrimonio, a obra estaba adxudicada por Cultura con 59.000 euros. Costounos moito, tanto os veciños como o párroco, conseguir que se arranxaran os retablos e, agora, estamos ca igrexia patas arriba.
Además, ponen de manifiesto que la iglesia ten moita importancia para os veciños e está recoñecida como unha xoia do patrimonio eclesiástico da provincia de Ourense. La reivindicación es participada por a xente nova, que está tomando cartas no asunto e non descartamos facer algún tipo de acto de protesta pois estamos desesperados, concluyen.
Gestiones del Concello ante la Xunta
El alcalde, Alfonso Villarino, afirma que la obra de restauración de los dos retablos no es del Concello, que fue adjudicada por la Consellería de Cultura y que Patrimonio la paralizó ó comprobar que os traballos da empresa adxudicataria non se axustaban as directrices que tiña que seguir para a restauración. No obstante, asevera que está realizando gestiones ante Patrimonio con el fin de que se retomen cuanto antes. Estamos tratando de que lle den unha solución, aclara.
