La asociación ‘O Sobrañal’ crea un aula de interpretación en una casa y recupera la Ruta das Estañeiras

Los vecinos de Feces de Cima revitalizan el pueblo con olivos y restaurando patrimonio

Vecinos de Feces de Cima, en la plantación de olivos. (Foto: Miguel Ángel)
Recuperar el patrimonio y los recursos agrarios de Feces de Cima para impulsar uno de los pueblos del municipio de Verín más desconocidos. Este es el objetivo de la Asociación O Sobrañal, integrada por los vecinos, que está rehabilitando una casa del pue bloara convertirla en un museo, llevará a cabo la recuperación de la Ruta das Estañeiras para la práctica de senderismo y de un molino. En la actualidad, gestiona desde hace un año una plantación de olivos de cinco hectáreas para la producción de aceite.
Feces de Cima es ‘o eterno descoñedido’, dice Luis Fernández, presidente de la Asociación O Sobrañal de esta localidad que aglutina a los 35 vecinos del pueblo. El colectivo, que se puso en marcha hace dos años, está llevando a cabo un proyecto para la revitalización de la localidad mediante la recuperación del patrimonio y recursos endógenos. De hecho, gestiona desde el año pasado una plantación de cinco hectáreas de olivos que producirán 12.000 kilos de aceite por hectárea dentro de cuatro años con unos 30.000 euros de beneficios. ‘É un proxecto moi bonito que persigue involucrar a todo o mundo para vender no mercado galego e que sexa unha fonte económica para os veciños do pobo’, apunta Luis Fernández.

Además, en este momento, está llevando a cabo la rehabilitación de de una casa del pueblo para convertirla en aula de interpretación para que ‘conte a historia viva da localidade’ y emprenderá la recuperación de la Ruta das Estañeiras, que abarca aproximadamente siete kilómetros y discurre junto a viejas minas de estaño. El presupuesto es 217.152 euros de los que 121.127 son subvencionados por la Axencia de Desenvolvemento Local de Medio Rural.

Limpieza

‘Temos que partir prácticamente de cero ca limpeza dos camiños e a sinalización pero merece a pena pois é unha zona que ofrece paisaxe’, aclara el presidente del colectivo.

Luis Fernández explica el sentido de la apuesta por el medio rural: ‘Somos un pobo de Verín pero non pertencemos ó Val do Támega senón do Barxas, que é o río que ven de Vilardevós. Fumos o pobo máis aislado, que ademais fai fronteira con Portugal, e o noso reto é dinamizalo’. Se trata de una finalidad turística ‘para que teña visitantes’, comenta, pero sobre todo que pueda sobrevivir y crecer con sus propios recursos agrarios, forestales y ganaderos. ‘Destinamos o noso tempo a buscar financiación e a medida que a obtemos imos executando os proxectos para este cambio positivo do pobo’.

Otra de las iniciativas que prepara el colectivo es la recuperación de un antiguo molino que ‘se atopa en moi bo estado é o que queremos darlle vida para mostrar cómo funcionaba’.

Robos

Sin embargo, este ambicioso proyecto sufrió un percance en las últimas semanas que causa preocupación entre los vecinos. La plantación de olivos está registrando robos de más de 100 plantas (hay 30.000). ‘No sabemos que está ocurrindo pero é unha lástima que nos rouben cando todos os veciños estamos defendendo con moita ilusión este proxecto. Gostaríanos que deixase de pasar porque se está perxudicando a todo un pobo’, lamentó Luis Fernández. Feces de Cima linda con la localidad lusa de Lamadarcos, situación geográfica que generó un intercambio histórico en las relaciones de los vecinos de ambas poblaciones. Precisamente, en los últimos días el Concello anunció la construcción de un pequeño puente para comunicar las fincas de un lado y otro de la frontera, una noticia que fue muy bien recibida por los habitantes de este tramo de la ‘raia’.


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