Las instalaciones de Fontenova recibieron a sus primeros usuarios tras permanecer 50 años cerradas
Fontenova recibió ayer a los primeros agüístas tras casi 50 años cerrado. Tras un notable lavado de cara, y con sus muros decorados con carteles de antaño o fotografías en las que se puede comprobar el esplendor de la marca verinense, su buvette abrió las puertas a primera hora de la mañana -aunque la comitiva oficial dispuso personarse pasadas las once- para que aquellos que en su día degustaron sus aguas vuelvan de nuevo a recuperar tan sana costumbre.
El primero en tomar las aguas de manera oficial fue un catalán de la localidad ilerdense de Balaguer, al que su pareja lo arrastra todos los veranos hasta Verín. Jordi Ticó, profesor de Historia, se felicitó de la recuperación del balneario, "que ya conocía por los veranos que he pasado, aunque no con la posibilidad de poder degustar su agua". Interesado en sellar el documento que le acredita como embajador de estas aguas, posó saboreando las de Fontenova, especialmente indicadas para el aparato digestivo y aptas para cualquier tipo de mezcla, incluido el whisky.
El horario de apertura previsto tanto para ésta como para el resto de los diferentes manantiales será de ocho de la mañana a dos de la tarde, y de las 18 a las 20 horas.
El alcalde de Verín destacó lo emblemático del retorno de agüísmo a Verín. “Queremos volver a arrancar este motor, que moveu en tempos toda a economía de Verín. Esta máquina que nos levou por toda España non pode seguir parada”. Seoane avogó por “recuperar o valor económico e cultural da auga en Verín, xusto cando estudos recentes recoméndanlle á Seguridade Social voltar a receitar a cura con auga, como complemento de medicina preventiva”. “Nos non imos alardear agora de instalacións nin de despregue de medios, imos arrancar de novo o auguismo en Verín”, insistió, “agradecendo ós propietarios das fontes o seu apoio incondicional.
Lourenzo hizo especial hincapié en que “coa recuperación do manantial de Fontenova cúmprese un dobre obxectivo. Por unha banda, a posta en valor das nosas augas e a recuperación do aguismo no concello, e doutra banda, a valorización do noso patrimonio xa que Fontenova constitúe un elemento arquitectónico único".
Aspecto que tenía el local de degustación antes de acometer la obras de acondicionamiento.
Aguas indicadas para trastornos digestivos, renales y hepáticos
Las aguas de Fontenova estuvieron siempre especialmente indicadas para los cálculos úricos, el reumatismo, gota y todos aquellos padecimientos del aparato digestivo y vesícula. Su vecina de Sousas, a escasos cinco minutos a pie, tenía indicaciones propias en problemas de riñón, hipercloridia, gastralxia, enteritis crónica y prostatitis crónica.
Las más alejadas, en la cercana localidad de Cabreiroá, las bebían aquellos aquejados de dolencias de las vías urinarias, trastornos gastro-hepáticos, cólicos y también cálculos de vesícula. La dibetes era otra de las enfermedades que sus propiedades combatía.
Además de las características mineromedicinales de las aguas, los visitantes podrán disfrutar del entorno de cada una de las fuentes y abandonar la villa con el pasaporte debidamente cumplimentado -siempre que en cada una de las degustaciones lo vise que los acreditarán como embajadores de las aguas de Verín y Chaves, después del novedoso programa puesto en marcha por la Eurocidade. En las oficinas de turismo se entrega un completo pack que incluye ese documento, el vaso oficial de la ruta, una guía y el lápiz para grabar los oportunos sellos.
