El primer ministro serbio, Vojislav Kostunica, pidió hoy a los serbios de Kosovo que no abandonen la provincia secesionista después de que la mayoría albanesa declare su independencia, algo que podría producirse este mismo domingo.
'Nuestra gente en Kosovo debería permanecer en sus casas, en su provincia, en su Serbia', aseveró Kostunica en una declaración que recoge la agencia estatal Tanjug.
'Nuestra gente en Kosovo debería permanecer en sus casas, en su provincia, en su Serbia', aseveró Kostunica en una declaración que recoge la agencia estatal Tanjug.
'Para el Gobierno, cualquier persona en Kosovo es considerada un ciudadano igual y con todos los derechos del Estado', añadió.
La declaración se produce después de un llamamiento de un importante serbio de Kosovo instando a los dirigentes serbios a no sembrar el pánico con su retórica y a permanecer en sus casas, pese los temores de posibles disturbios.
Kostunica dijo que Serbia está obligada a 'hacer absolutamente todo para permitir condiciones de vida normales en la provincia'. El 90% de los dos millones de habitantes de Kosovo son albaneses. Unos 120.000 serbios residen en distintos enclaves bajo la seguridad de unos 16.000 efectivos de la OTAN.
En este sentido, el portavoz de la KFOR, coronel Bertrand Bonneau, indicó que se ha reforzado la seguridad. 'Estamos intensificando nuestro estado de alerta para vigilar la situación, utilizando medios de inteligencia, más patrullas y una mayor visibilidad', señaló.
La declaración se produce después de un llamamiento de un importante serbio de Kosovo instando a los dirigentes serbios a no sembrar el pánico con su retórica y a permanecer en sus casas, pese los temores de posibles disturbios.
Kostunica dijo que Serbia está obligada a 'hacer absolutamente todo para permitir condiciones de vida normales en la provincia'. El 90% de los dos millones de habitantes de Kosovo son albaneses. Unos 120.000 serbios residen en distintos enclaves bajo la seguridad de unos 16.000 efectivos de la OTAN.
En este sentido, el portavoz de la KFOR, coronel Bertrand Bonneau, indicó que se ha reforzado la seguridad. 'Estamos intensificando nuestro estado de alerta para vigilar la situación, utilizando medios de inteligencia, más patrullas y una mayor visibilidad', señaló.
