Sólo podran acceder al Camiño da Rega los vehículos del vecindario
La Concejalía de Tráfico de Carballiño ha decidido iniciar el proceso de peatonalización de la travesía conocida como Camiño da Rega, en el centro del casco urbano de la villa, con el objetivo de zanjar el caos circulatorio que se registra en la actualidad y que ha sido motivo de quejas por parte del vecindario del entorno. En esta pequeña calle, que dispone de entrada pero que carece de salida, hace varios años que tiene vedado el acceso a vehículos, a excepción de los que son propiedad de los vecinos.
Sin embargo, éstos no pueden acceder a los garajes de sus inmuebles debido a que la calle está colapsada por el estacionamiento en ambas márgenes de la vía de los automóviles de los clientes de un área comercial allí ubicada. Ante esta situación, el concejal de Tráfico, Adolfo Nogueira, mantuvo una reunión con los propietarios del entorno, y se llegó al acuerdo de la colocación de bolardos en la entrada al callejón y así impedir el paso a automóviles ajenos.
El edil comentó ayer que "estamos xa a confeccionar un listado cos veciños con garaxe e o número de matrícula dos seus vehículos, a fin de entregarlles mandos a distancia que lles permitan baixar os bolardos cando desexen entrar ou salir". Esta travesía se convertirá en la tercera calle de paso peatonal y circulación restringida en la villa, tras la Rúa do Paseo (integrada por las calles Rosalía de Castro y Mosquera) y la rúa Perfectino Viéitez.
Además, el Concello carballiñés prepara también la colocación de nuevos bolardos en la bajada al barrio de Flores, "xa que o sistema hidráulico destes dispositivos leva avariado varios anos", de modo que sólo se permitirá la entrada a automóviles de los vecinos residentes en él. Adolfo Nogueira considera que "na actualidade hai unha importante superficie para estacionar na vila, sobre todo dende a urbanización das rúas Ben Cho Shey, Otero Pedrayo e Vaamonde, nas que se crearon 150 prazas para vehículos".
