Los carniceros que habitualmente utilizaban el matadero municipal de Carballiño para el sacrificio de animales han manifestado una vez más su malestar ante el retraso en la reapertura del establecimiento, después de los siete meses que han transcurrido desde que una explosión dejó inutilizada una
CALDERA DE AGUA CALIENTE.
Los carniceros y particulares de la comarca de Carballiño tienen que desplazarse hasta Ourense con el consiguiente gravamen económico que eso supone, dado que pese al tiempo transcurrido, ni la empresa concesionaria ni el Concello de Carballiño han acometido las obras necesarias para reponer el servicio. En ese sentido, también recuerdan que ocho empleados pasaron a engrosar las listas del paro.
El alcalde, Argimiro Marnotes, anunciaba que será necesario realizar una nueva adjudicación, puesto que el anterior contrato para la gestión del establecimiento ya está caducado, y con vistas a realizar posteriormente las obras.
Los carniceros y particulares de la comarca de Carballiño tienen que desplazarse hasta Ourense con el consiguiente gravamen económico que eso supone, dado que pese al tiempo transcurrido, ni la empresa concesionaria ni el Concello de Carballiño han acometido las obras necesarias para reponer el servicio. En ese sentido, también recuerdan que ocho empleados pasaron a engrosar las listas del paro.
El alcalde, Argimiro Marnotes, anunciaba que será necesario realizar una nueva adjudicación, puesto que el anterior contrato para la gestión del establecimiento ya está caducado, y con vistas a realizar posteriormente las obras.
