Un total de 92 solicitudes de familias para recibir ayudas para el comedor escolar en el próximo curso en la ciudad se han quedado en lista de espera, ante la insuficiencia del presupuesto del Concello de Ourense, como ya había ocurrido el curso anterior. El Concello, al carecer de presupuestos actualizados, destinó a la partida de comedores la misma partida (269.250 euros) que el curso pasado, lo cual no ha llegado de nuevo para cubrir a todas las familias que cumplían los requisitos. Además, el umbral económico, que se ha mantenido en 3.700 euros per cápita pese al alza inflacionaria, ha dejado excluidas a decenas de familias tanto en este tipo de ayudas como en las que se conceden para material escolar, que incluso no han llegado a gastar todo el crédito disponible ante la cantidad de solicitudes denegadas.
El gobierno local publicó ayer el listado de solicitudes admitidas, en espera y rechazadas en los expedientes de ayudas para la adquisición de libros de texto y material escolar, así como de comedor escolar para el curso 2023/2024. La lista estará disponible para consultar alegaciones hasta el jueves 21 de septiembre.
La convocatoria de este curso se ha vuelto a mostrar insuficiente y deja a centenares de niños sin ayudas. En el caso de las ayudas a comedor escolar (90 euros al mes por solicitud aprobada), se han agotado los 269.250 euros consignados en el presupuesto, al admitir 305 solicitudes. Sin embargo, otras 92 solicitudes se quedan en lista de espera -es decir, cumplían los requisitos, pero el crédito se había agotado ya-. Además, se denegaron otras 463 (158 más de las que sí se admitieron), de las cuales 226 se rechazaron por sobrepasar la familia demandante los 3.700 euros de renta per cápita anual, un techo muy restrictivo y que no se ha variado respecto al curso anterior.
En el caso del material escolar, pese a haberse consignado 25.000 euros en ayudas como el año pasado, tan solo gastará el Concello 15.260 euros, dejando 10.000 sin invertir, al haber excluido a centenares de familias por mantener un muy ajustado criterio económico: se han concedido 142 solicitudes y quedaron excluidos 443 niños, de los cuales 128 solicitudes han sido rechazadas por superar el umbral económico (4.000 euros per cápita).
Jácome prometió una modificación presupuestaria que nunca llegó
El gobierno dirigido por Gonzalo Pérez Jácome no ha hecho nada para evitar que cientos de familias queden excluidas de las ayudas escolares en una época especialmente complicada por el golpe de la inflación. Según establecen las bases, una familia de tres miembros (dos progenitores y un hijo) ya no pueden recibir estas ayudas a comedores si tienen ingresos de más de 11.100 euros anuales, y quedan fuera de las ayudas a material escolar al sobrepasar ingresos de 12.000 euros, cifras ambas que se encuentran por debajo de Salario Mínimo Interprofesional, que se sitúa en 15.120 euros al año.
No es de extrañar que con estos criterios tantas familias vean cómo se les ha excluido argumentando que superan el umbral económico. El año pasado, el alcalde prometió que haría una modificación de crédito para que todas las solicitudes que quedaron en cola pudieran entrar, algo que nunca cumplió. Lo que hizo fue mantener las mismas cuantías para este curso.
