Los 'sin techo' llenan las entidades benéficas en busca de ropa y el gasóleo de calefacción se dispara

El frío obligó al Concello a cortar el agua en las fuentes para evitar roturas de surtidores

Bomberos tirando sal sobre el hielo.
La intensidad del frío ha obligo a la Concejalía de Medio Ambiente a suspender el abastecimiento en las fuentes de la ciudad, al congelarse surtidores y cañerías. Las gélidas temperaturas también afectan a los 'sin techo', que buscan cobijo y ropa en entidades benéficas.
Las gélidas temperaturas mantienen congelada a la provincia. En la madrugada el mercurio descendió hasta los siete grados bajo cero en Xinzo y en la ciudad no marcaba menos dos a las diez de la mañana. Durante la madrugada de ayer, en toda la provincia se registraron temperaturas de entre cuatro y siete grados bajo cero'.

La situación mejorará durante la jornada de hoy. Desde el observatorio gallego se anunciaba una subida moderada de la temperatura, sobre todo nocturna, debido a la entrada de una borrasca por el Atlántico, que dejará precipitaciones débiles. Pero mientras no llega la lluvia, los 'sin techo' son los que peor lo están pasando. 'Estamos atendiendo a mucha más gente de la que suele ser habitual en las instalaciones. La mayoría acude a buscar todo tipo de ropa de abrigo', explicaban en la asociación religiosa Cáritas.

Pero, además, el Concello de Ourense ha tenido que suspender el abastecimiento de agua en las fuentes públicas, con objeto de frenar las continuas roturas de surtidores y cañerías, debido a su congelación durante la noche. La Concejalía de Medio Ambiente excluye de este plan las fuentes de agua potable de uso público en parques infantiles, aunque sólo estarán operativas en las horas centrales.

La ola de frío disparó el consumo el de energía eléctrica. Los hogares y empresas ourensanas demandaron un 40 por ciento más de fluido eléctrico, según los datos que maneja la empresa eléctrica Unión Fenosa.

La demanda también se disparó entre los respartidores de gasoléo para calefacción e incluso áreas comerciales como Carrefour vieron aumentadas, más de un 20 por ciento, de estufas, radiadores y mantas eléctricas. Otros que no dan abasto son los camiones repartidores de sal para evitar la formación de placas de hielo en las carreteras. Durante la pasada madrugada, los efectivos del Ministerio de Fomento, Xunta y Diputación repartieron más de 120 toneladas. Los bomberos de la ciudad también pasaron buena parte de la madrugada y tarde echando sal en el casco urbano para evitar caídas. Las placas de hielo fueron constantes en zonas de sombra.

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