El estado de obras de los 400 kilómetros de trazado incluidos en la licitación presentada ayer es muy diverso, pero el mayor retraso se registra en la provincia de Ourense, coincidiendo también con los tramos más complejos.
Así, entre Olmedo, Zamora y Lubián, las obras están ya en fase de construcción de la plataforma viaria en la mayoría de los tramos. El más retrasado es el segundo túnel de Padornelo, que en un principio no estaba previsto construir (se iba a realizar sólo un túnel, lo que suponía un 'cuello de botella' en la vía), por lo que su tramitación está más retrasada.
Mientras, en la línea Lubián y Ourense, sólo se han comenzado las obras en tres subtramos intermedios, que suman 22 kilómetros entre Porto (Vilar de Barrio) y Taboadela, los únicos que el ministerio no modificó del recorrido entre la localidad zamorana y la ciudad, porque consideró aptos para alta velocidad los primeros proyectos diseñados.
Mientras, entre Lubián y Porto se cambiaron los proyectos para adaptarlos a las características propias del AVE y aún están sin licitar. Para acometer las obras, el ministerio fragmentó el trazado de un total de 62,6 kilómetros, en 18 contratos, un número muy superior al habitual en este tipo de obras. De hecho, lo más frecuente es que se contraten tramos de entre seis y ocho kilómetros, incluyendo los túneles y viaductos que requieran. No obstante, en este caso, en varios de los contratos se encargarán sólo de una boca del túnel, debido a su gran longitud. Ocurre en los de O Cañizo, A Canda o Espiño: tres túneles cuyas dos bocas serán ejecutadas por diferentes empresas. El presidente de Adif, Antonio Marín, señaló que está prevista la disponibilidad de tuneladoras suficientes para poder acometer las obras en el plazo previsto, y que la línea esté operativa a finales de 2015.
Mientras, el trazado entre Taboadela y Ourense, que también fue modificado para evitar su paso por el centro de la ciudad en la zona de San Francisco, se ejecutará con un sistema similar y sus 17 kilómetros serán divididos en seis contratos.
Mientras, en la línea Lubián y Ourense, sólo se han comenzado las obras en tres subtramos intermedios, que suman 22 kilómetros entre Porto (Vilar de Barrio) y Taboadela, los únicos que el ministerio no modificó del recorrido entre la localidad zamorana y la ciudad, porque consideró aptos para alta velocidad los primeros proyectos diseñados.
Mientras, entre Lubián y Porto se cambiaron los proyectos para adaptarlos a las características propias del AVE y aún están sin licitar. Para acometer las obras, el ministerio fragmentó el trazado de un total de 62,6 kilómetros, en 18 contratos, un número muy superior al habitual en este tipo de obras. De hecho, lo más frecuente es que se contraten tramos de entre seis y ocho kilómetros, incluyendo los túneles y viaductos que requieran. No obstante, en este caso, en varios de los contratos se encargarán sólo de una boca del túnel, debido a su gran longitud. Ocurre en los de O Cañizo, A Canda o Espiño: tres túneles cuyas dos bocas serán ejecutadas por diferentes empresas. El presidente de Adif, Antonio Marín, señaló que está prevista la disponibilidad de tuneladoras suficientes para poder acometer las obras en el plazo previsto, y que la línea esté operativa a finales de 2015.
Mientras, el trazado entre Taboadela y Ourense, que también fue modificado para evitar su paso por el centro de la ciudad en la zona de San Francisco, se ejecutará con un sistema similar y sus 17 kilómetros serán divididos en seis contratos.
