La fiscal pide cárcel para los padres por desatender a tres niños de corta edad

A juicio por tener a sus hijos con piojos y caries

Los padres de tres niños con edades comprendidas entre los siete y dos años se sentarán en el banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal 2 de Ourense, una vez sean localizados por las fuerzas de seguridad, acusados de no atender a sus hijos (delito de abandono de familia). La fiscal reclama para Azucena J.J. y Julián M.J. un pena de cuatro meses de prisión así como una inhabilitación para el ejercicio de la patria potestad durante seis años.
Las diligencias penales se abrieron en 2011 cuando la Xunta puso en conocimiento del juzgado la situación de desprotección que sufrían los pequeños. La entidad pública asumió a finales de octubre, por el trámite de urgencia, la tutela en virtud del desamparo detectado y que ponía en entredicho los deberes de asistencia a los que estaban legalmente obligados al ostentar la guarda y custodia. Los niños, según los informes sociales remitidos al juzgado, iban semidesnudos con ropa sucia y rota. Además, en muchas de las ocasiones caminaban descalzos. La higiene de los críos también dejaba mucho que desear. Según establece la fiscal en su escrito de calificación provisional, 'presentaban piojos en gran cantidad'. A nivel sanitario, los tres menores no seguían el calendario de vacunaciones infantiles y su dentadura -detalla la fiscal- presentaba 'abundantes caries en la boca sin tratar médicamente'. Por último, ninguno de los hijos de la pareja estaba escolarizado.

El Juzgado de lo Penal 2 había señalado en la mañana de ayer el juicio pero la fiscal se mostró partidaria de la suspensión -están en paradero desconocido y no fue posible entregarles la notificación judicial- para oficiar a las fuerzas de seguridad a que los detengan y así entregarles la citación y en caso de que no acudan desarrollar el juicio en su ausencia (la petición de pena lo permitiría).


OTRO CASO

Asimismo, la jueza dejó visto para sentencia la causa seguida contra Rocío J.M. por abandono de familia por la que se enfrenta a una petición de siete meses de prisión. La acusada, madre de un niña de 12 años, fue enjuiciada por consentir que la menor no fuera con regularidad a clases e el CEIP Curros Enríquez, en donde estudiaba segundo curso de Primaria en el año escolar 2008/2009, pese a las advertencias de la dirección.

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