OPERACIÓN DESTROYER

La operación ‘Destroyer' eleva a siete los detenidos por 25 robos en viviendas

En la provincia de Ourense actuaron en 22 casas de los concellos de Pereiro, Nogueira, Porqueira y Maceda. 

Se elevan a siete los detenidos en el marco de la operación "Destroyer", que continúa todavía abierta a la espera de ser interceptadas más personas relacionadas con la banda acusada de 25 robos en domicilios. Informaron fuentes policiales de que es posible que aumente también el número de delitos, a falta de investigar más denuncias.

La banda quedó desmantelada en la madrugada del sábado, después de los registros en los tres domicilios donde vivían los supuestos delincuentes y custodiaban los objetos robados: calle Marcelo Macías, carretera de A Granxa y Cabeza de Vaca, todos ellos en la ciudad. De hecho, desde última hora del viernes, un amplio despliegue del cuerpo vigilaba la zona.

Las viviendas donde perpetuaron los robos comparten la característica de estar emplazadas en núcleos rurales. Concretamente, en la provincia de Pontevedra actuaron en tres viviendas de Salvaterra do Miño. En Ourense, robaron en 22 casas habitadas de los concellos de Maceda, Porqueira, Pereiro de Aguiar o Nogueira de Ramuín, entre otros. Precisamente, en este último accedieron al interior de varios domicilios. Uno de los afectados, residente en San Miguel do Campo informó a este periódico de que fue el pasado 10 de febrero cuando "llegamos a casa y vimos que nos habían robado relojes, joyas, dinero, perfumes y una cartera". Fue la propia Guardia Civil la que recomendó a esta familia denunciar los hechos por haberse registrado más robos en viviendas cercanas. Este hombre, que prefirió no revelar su identidad, aseguró haber visto a "gente extraña en coches desconocidos".

Y es que precisamente este era el modus operandi del supuesto grupo delictivo. Recorrían en varios vehículos -que también fueron intervenidos por la Guardia Civil- los concellos donde actuaron para observar y vigilar los movimientos y costumbres de sus moradores. Cuando se cercioraban de que las viviendas quedaban vacías, accedían a su interior para hacerse con dinero, joyas y televisores, entre otros efectos.

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