Con calor, que favorece la evaporación, y la ausencia de precipitaciones, el abastecimiento de agua a la ciudad de As Burgas se produce ya en buena parte del bombeo del Miño.
Con calor, que favorece la evaporación, y la ausencia de precipitaciones, el abastecimiento de agua a la ciudad de As Burgas se produce ya en buena parte del bombeo del Miño. Porque el embalse de Cachamuiña, que lleva el agua a castadón, de donde se traslada a los depòsitos de la ciudad, entrará en breve bajo mínimos, lo que impedirá su uso para el suministro de los ciudadanos. Tan sólo permanecerá el caudal ecológico, una lámina de agua que permitirá la supervivencia de la flora y fauna acuáticas.
La situación permanecerá así hasta que haya lluvias suficientes, pero esto es poco probable, según reconoce la Agencia Estatal de Meteorología, que a finales de este mes hará un balance de julio similar a junio; es decir, cero precipitaciones en la provincia.
Recuerda que, en general la precipitación media fue un 26% inferior a la normal en un mes de junio, aunque haya sido un mes húmedo en otros puntos de España. Tampoco se prevén lluvias en las próximas semanas, convirtiendo este verano en el más cálido del presente siglo. De hecho, julio ya es el segundo mes más caluroso desde 2000 tras el del año 2013. La media está en 33 grados, los que se prevén para hoy, aunque hay que recordar que puntos de la provincia alcanzaron varios días 40 y 41 grados.
