Las protectoras de animales de la provincia afrontan en estas semanas un pico en la demanda de mascotas, aunque en la mayoría de casos las solicitudes de adopción no cumplen con sus criterios, ya que buscan hacerse como regalos a terceros, algo que va en contra de los principios de estas asociaciones.
“Estamos en contra de regalar animales, cuando una persona quiere un animal, tiene que venir aquí el sujeto legal que va a hacer la adopción, tenemos que conocerlo y tiene que firmar una serie de papeles legales que van a la Xunta”, afirmaron desde la Protectora de gatos y perros de Ourense (Progape), donde paralizan las adopciones en las semanas previas a las fiestas de Navidad y Reyes.
“Si quieres hacer un regalo a tu pareja, a un amigo o a tus padres, tienen que venir ellos aquí, nos parece muy bien que el regalo sea acompañarlos a las instalaciones y pagarle la adopción. Lo que no puede ser es que venga otra persona, se lleve al animal y luego no lo quieran y lo abandonen”, agregaron.
En Peludines Callejeros de Valdeorras la filosofía es la misma, y aseguran que las entrevistas son muy escrupulosas para asegurarse de que cada animal encuentra el hogar que necesita. “La persona adoptante tiene que ser la que decida si quiere tener un perro o un gato, las protectoras hacemos entrevistas y cuestionarios, por lo que el tema del regalo se fastidia, tenemos que tratar directamente con la persona que quiere adoptar”, afirmó Jorge Yánez, miembro de la protectora.
La compatibilidad entre mascota y adoptante debe ser perfecta, ya que los animales que llegan a estas instituciones suelen tener un pasado con abandonos o malos tratos, lo que les dificulta el proceso de volver a confiar en un humano. También es imprescindible que el solicitante comprenda los gastos y responsabilidades que implica el cuidado de la mascota. “A un perro hay que llevarlo al veterinario, pagarle las vacunas”, concluyó Yáñez.
