El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) cortó el tráfico ferroviario entre Monforte y Valdeorras por un nuevo derrumbe. Pasadas las seis de la mañana de ayer, la empresa que gestiona la infraestructura informó de un corrimiento de tierras entre las estaciones de Freixeiro (Quiroga) y San Clodio-Quiroga, uno de los tramos más conflictivos por desprendimientos.
Fuentes de Adif detallaron que el derrumbe tuvo lugar en el entorno del túnel 62, un emplazamiento donde la vía serpentea por una orografía escarpada. La caída de la ladera afectó a la catenaria, el hilo aéreo que suministra electricidad al tren. “Son un centenar de metros de catenaria afectada y hay que retirar todo el material del desprendimiento”, precisaban desde el ente gestor de la infraestructura.
Estaba previsto llevar los trabajos a lo largo del día con la idea de restablecer el tráfico hoy. Sobre la causa, en Adif barajaban la meteorología adversa de los últimos días. “Es un corrimiento de ladera, una inestabilidad del terreno; entendemos que ha sido a causa de las lluvias”, comentaban.
El derrumbe afectó a las dos únicas frecuencias de ida y vuelta que comunican Ourense con la comarca de Valdeorras y la vecina del Bierzo: un Regional y un Alvia. Fuentes de Renfe explicaron que los más afectados son los usuarios del Regional, para quienes se dispusieron autobuses entre Ourense y San Clodio. Los pasajeros del Alvia ya hacen este trayecto en bus por las obras del ferrocarril entre la ciudad y Monforte de Lemos.
Lo sucedido ayer no es novedoso en el tramo de Freixeiro a San Clodio-Quiroga. Este sector de la vía a León viene registrando incidentes similares durante los últimos años. En ocasiones, provocando descarrilamientos. En enero de 2020, un Trenhotel quedó atrapado en la estación de Freixeiro por un desprendimiento. En agosto de 2022, descarriló un Alvia por idéntico motivo. En enero de 2023, el montículo de tierra de otro corrimiento averió otro Alvia y obligó a interrumpir el tráfico.
Falta de inversión
Desde los sindicatos critican la falta de inversión en la infraestructura. Juan Francisco Sánchez, ferroviario de la Confederación General del Trabajo (CGT) señala la escasez de gasto en las líneas de ancho ibérico. “Hai determinadas liñas que nos están recibindo os orzamentos precisos. Os orzamentos estanse destinando principalmente a liñas de alta velocidade, entón as redes convecionais quedan nun segundo plano e acontecen estas cuestións”, afirma.
Sánchez señala que “orograficamente son zonas complicadas” cuyo estado empeora “con anos coma este, de moita humidade e moita chuvia”. El mantenimiento “non é preventivo, é máis ben correctivo” en estas líneas de menor tráfico de viajeros, según comenta. Aun así, “máis que falta de mantemento, é falta de investimentos”, matizó. El sindicalista puso el ejemplo de la línea Monforte-Ourense, ahora cortada por obras, como ejemplo de fuerte inversión en el tren convencional: “Mentres isto non se faga, iremos parcheando o que hai”.
Plan de arreglos
El derrumbe tiene lugar mientras Adif tramita de urgencia un plan de choque para actuar en varios puntos de la red ferroviaria convencional de Galicia. Requiere una inversión de más de 4,6 millones de euros, y está destinado a consolidar tramos como el comprendido entre Ourense y Ribadavia, donde este invierno se contabilizaron numerosas incidencias. En la documentación publicada por Adif, se alerta del “grave riesgo de colapso de la infraestructura” y del “riesgo real sobre las circulaciones”, así como sobre “la seguridad de personas o vehículos que circulen por la vía”. En la propuesta de declaración de emergencia figura uno de los desprendimientos en el tramo Freixeiro-San Clodio, aunque no se recogen medidas concretas.
