El Concello acondicionará un terreno de 1.400 metros cuadrados junto a la Casa Río Cigüeño
Los perros de O Barco tendrán su propio parque, en este caso, denominado zona de esparcimiento canino "ZEC". La propuesta de la protectora Peludines Callejeros de Valdeorras prosperó y el equipo de gobierno reunió ayer la Comisión informativa municipal de Medio Ambiente con el propósito de consultar la posible asignación de un espacio a las mascotas: las inmediaciones de la Casa Río Cigüeño, en la Avenida do Bierzo.
Fueron dos los lugares que propuso el equipo de gobierno, aunque ambos ubicados en la misma zona. Los asistentes a la cita eligieron el más próximo a la Avenida do Bierzo, que recibió el visto bueno de todos los grupos políticos representados en la Corporación: PP y Riada Cidadá. La superficie total es de aproximadamente 1.400 metros cuadrados, siendo las medidas del recinto destinado a los perros las siguientes: 60 metros de largo por 18 de ancho.
El alcalde barquense, Alfredo García Rodríguez, explicó que el Concello allanará el terreno para, posteriormente, sembrar césped. Los planes municipales también contemplan la instalación de un sistema de riego para que ofrezca una imagen de verdor en este lugar, que será cerrado para que los animales puedan correr sueltos en el interior del recinto. Por otra parte, el proyecto contempla la colocación de juegos específicos para las mascotas.
Los amos también tendrán aquí un lugar de esparcimiento, pues las brigadas plantarán árboles al lado de la zona de esparcimiento canino para que den sombra. Además, colocarán bancos, papeleras y carteles informativos de que las obligaciones de los dueños de los canes son las mismas que rigen en el resto de la villa.
La creación de una ZEC fue solicitada por la protectora Peludines Callejeros de Valdeorras, que dirige Jorge Yáñez Fernández, a raíz de la entrada en vigor de la Lei de protección e benestar de animais de compañía en Galicia, que la Xunta aprobó en enero. La nueva normativa prohíbe llevar sueltos los animales por la vía pública, una norma que llevó a la asociación a plantear la necesidad de un terreno donde soltarlos.
En O Barco ya hubo una ZEC. Fue acondicionada en 2013, en la zona más alejada del centro del área recreativa de O Salgueiral. Nunca funcionó, como ayer corroboró el alcalde, Alfredo García. "No consta que entrase nunca un perro en ella", dijo. Su lejanía del casco urbano y la proximidad de la zona donde se desarrollan los botellones desanimaron a los posibles usuarios de acudir a este punto. n
