La oposición critica las demoras y el PSOE culpa a otras administraciones y a las empresas
El retraso en la ejecución de varias obras y trabajos provocó ayer varios encontronazos entre el equipo de gobierno socialista y la oposición de Riada Cidadá (RC) y PP. Sucedió en una sesión que cerró un rifirrafe entre el concejal popular Enrique Pérez Roca y el alcalde, Alfredo García Rodríguez. Su disputa fue presenciada por un grupo de alumnos del 2º Ciclo Administrativo del Instituto Lauro Olmo barquense, que acudió para conocer el desarrollo de un pleno.
El intercambio de críticas entre Pérez Roca y Alfredo García comenzó cuando el edil popular se quejó de los siete meses que tardó el Concello en reparar varios bancos públicos de Veigamuiños y el alcalde respondió recordando los varios años que sus vecinos llevan esperando por las aceras que anunció la Deputación provincial.
Antes del enfrentamiento verbal entre el alcalde y el concejal del PP, fue el edil de RC, Félix García Yáñez el que protestó por el retraso en las obras de mejora de la piscina climatizada. "Se non hai intención electoral, hai deixadez de funcións", dijo el concejal, refiriéndose a las elecciones municipales 2019. Aprovechó la ocasión para poner sobre la mesa otros aplazamientos en la ejecución de proyectos: pista polideportiva de Vilanova, escuela infantil y pabellón del colegio Julio Gurriarán.
El alcalde, Alfredo García, fue rotundo en su respuesta: "Non queremos chegar ás eleccións con obras en ningún sitio". Seguidamente, atribuyó las demoras a la Administración autonómica -son los casos de la pista de Vilanova y del pabellón del colegio- y a las empresas adjudicatarias de la guardería y de los proyectos de la piscina climatizada.
Esta polémica surgió al debatir la aplicación de una partida de 106.000 euros, destinada inicialmente a reformar la Praza das Airas -obra que no podrá ejecutarse este año-, en la ejecución de la segunda fase del proyecto de la piscina. La oposición también criticó el alto coste de la mejora de estas instalaciones, 416.000 euros, muy lejos del canon que abonó la empresa que la estuvo gestionando. A su vez, el concejal de RC, Félix García defendió que "a piscina debe ser pública, levada ben por unha emprsea municipal ou por empregados municipais". El punto fue aprobado con los votos favorables de PSOE y PP, optando por la abstención RC.
La Corporación también aprobó, esta vez por unanimidad, la asignación de una partida de 1.677 euros para una actuación urbanística en la rúa Miño y varias facturas de 2017, entre las que sobresale un convenio con la Banda de Música, por 4.250 euros. Además de las bonificaciones en el impuesto de construcciones, instalaciones y obras (ICIO), el pleno también dio su visto bueno al expediente que determina que el camino de A Devesa, en Veigamuiños, no es de titularidad municipal.
