En gran parte de los casos, el dinero desaparecido estaba en cuentas de ahorro de los clientes
Un buen número de las reclamaciones de los clientes de la oficina del Banco Santander en O Barco que echan en falta dinero de sus cuentas llevan la firma de pensionistas. Así lo apuntaron fuentes próximas a los afectados, que explican que el perfil medio "es el de un ahorrador jubilado, que posee un nivel cultural bajo. Muchos de ellos habían depositado en su cartilla los ahorros y apenas la movían. En algún caso, el titular de la cuenta llevaba sin realizar anotaciones en ella desde principios de la década de los 90", señalaron estas mismas fuentes.
El total hermetismo que mantiene Banco Santander es suplido por los comentarios de los afectados y de sus allegados. Algunos de los cuales comienzan a recabar información y no descartan unirse para defender sus reclamaciones. En todo caso, este diario contactó varias veces con la oficina de O Barco y con el gabinete de Comunicación del banco, con sede en Madrid, sin obtener valoración alguna.
"Las anomalías detectadas en las cuentas datan de hace varios años", explicaron las mismas fuentes. Añadieron que "comenzaron ya en el Banco Español de Crédito (Banesto)", la entidad bancaria que a principios del año pasado se integró en el Banco Santander. El hermetismo existente dificulta conocer con exactitud la cuantía de la cantidad reclamada por los clientes, aunque todas las fuentes consultas afirmaron que supera ampliamente el millón de euros.
MÉTODOS
Los afectados refieren métodos muy dispares para describir cómo pudo haber desaparecido una parte de sus ingresos: "Creemos que en algún caso la retirada del dinero fue realizada simulando la firma del titular de la cartilla. En otras anotaciones podrían haber recogido cargos de recibos de pólizas de seguros falsas".
El banco parece responsabilizar de las irregularidades a un solo empleado, y así aparece reflejado en las cartas de reclamación que dio a firmar a los afectados, a los que aseguró que devolverá el dinero, aunque no concretó fecha, según la fuente consultada. Añadió que hay clientes que creen que podría haber otras personas conocedoras de lo que sucedía.
