Sin tiempo para atornillar todos los detalles del partido de esta noche en el Pazo (20:45 horas) ni para lamentar los errores del anterior en Alicante. Sin margen para meditar, el COB regresa a la competición y lo hace para recibir al mejor equipo de una liga con escaso margen de maniobra entre los más ilusionados y los primeros en tener dudas.
Complicado rival en un mal momento para un COB que tiene doble objetivo. El primero es obvio, mejorar la imagen de un partido en Alicante que garantiza el éxito a poco que se compita. Confirmar que el último partido fue una mala noche para un equipo que no ha dejado de progresar desde que empezó la pretemporada y que está a una victoria esta noche de mantener el ritmo de los mejores. El mejor dato posible para evitar alarmas absurdas y peligrosas.
Conseguir esa mejoría es el paso que lleva a la siguiente meta: ganar el partido. Objetivo realmente complicado cuando lo que está enfrente es un equipo sin fisuras. Con todos los méritos de los que carecen los equipos hechos a punta de talonario y avisando de sus intenciones ya desde el inicio de la pretemporada.
El Valladolid llega a Ourense como líder numérico y moral de la LEB Oro. En las cifras tiene competencia, en lo abstracto no admite duda. Hugo López supera lo que parecía imposible, el rendimiento de un equipo que con Paco García como entrenador se acostumbró a competir por encima de las expectativas.
Los bases
Óscar Alvarado se enfrentará su ex equipo en el partido menos "especial" de los dos que depara la temporada. Su parte del trabajo será clave para tener opciones de victoria. Un cuarteto de bases que no se parecen en nada entre sí y que tiene capacidad para influir claramente en el resultado.
La pareja del COB tiene que conseguir el criterio y la continuidad que no tuvo en Alicante. No pueden dejar que, como hizo Pedro Llompart, el rival domine tan claramente el ritmo y el rumbo del partido. En el Valladolid no hay un base con esos galones, pero Toms Leimanis también es uno de los buenos bases de esta liga. Uno de los factores diferenciales en este inicio de temporada del rival del COB. El letón puede anotar o generar con criterio y con una gran lectura del juego por parejas. Mike Torres está siendo capaz de ser igual de importante con menos talento.
Entre los dos superan los 20 puntos para su equipo y la pareja del COB tiene que exigirse más para bajar los números de sus pares y subir los propios. Sin ese paso adelante será complicado que los ourensanos tengan opciones de de victoria.
Juego exterior
En el perímetro el Valladolid va más justo de jugadores, pero también tiene pegada. Bartley es una de las sensaciones de liga. Capaz de ser importante en defensa y en ataque, cerca y lejos del aro. No tiene el COB un "tres" que le compita en físico al norteamericano. Niksha Federico tiene los balones que se le negaban en Vitoria y Juan Rubio debería tener minutos con la baja por lesión de Mackenzie.
Con otro tipo de jugadores, el COB debe oponer respuesta. Edu Martínez y Connor Wood vienen de firmar nu partido nulo de acierto. Dos tiradores con confianza para recuperar la puntería en un partido en el que son imprescindibles. Ott siempre se antoja baza segura y Pluta debe decidir si quiere ser importante o ha confundido la oportunidad que se le está dando. Manu Vázquez, por los aleros que tiene el Valladolid, tiene papeletas para debutar en casa.
Las zonas
Por dentro tampoco aparecen ventajas a la vista para el COB. Balaban y Serrano sufrirán ante dos pívots muy duros cerca del aro. Van Wijk y Tshikaya competirán contra el liderazgo de Sergio de la Fuente y la versatilidad de Adekoya.
Mucho bueno que respetar en el Valladolid, pero el COB ya demostró ante el Palencia que puede rendir ante equipos de este nivel. Esta vez con menos calor en la grada, pero con la rabia que debe dar el partido anterior. Oportunidad inmejorable para reivindicar la confianza en un COB con un propósito de enmienda sencillo de expiar, solo necesita competir al máximo de sus posibilidades.
Paco Paz, 20:45 horas
