Persiguió a una de las víctimas con un cuchillo por el centro de Xinzo hasta el cuartel de la Guardia Civil
Un vecino de Xinzo, Kamal M., de 35 años y natural de Marruecos, fue detenido a las 00,10 horas de ayer como presunto autor de un delito de amenazas al intentar agredir con un cuchillo a sus cuatro compañeros de piso cuando le exigieron su parte para pagar el alquiler de la vivienda, un segundo piso del número 27 de la calle San Sebastián de la villa.
El enfrentamiento se originó cuando el agresor y sus compañeros se disponían a ir a la cama tras analizar los distintos pagos del alquiler de la casa. Uno de ellos exigió a Kamal M. su aportación (al parecer lleva meses sin contribuir), petición que no le asentó nada bien y "comenzó a ponerse muy violento", explicó una de las víctimas, Abdelmounim E.
Sus compañeros intentaron mediar, llegando incluso a forcejear con él para que se calmara, pero el
presunto agresor emprendió al golpes con el mobiliario y puertas de la vivienda, hasta situarse en la cocina, apoderándose de dos cuchillos con los que amenazó a los compañeros, que ante la agresividad que mostraba, tres se encerraron con llave en una de las habitaciones, mientras que otro logró alcanzar la puerta y escapar de la vivienda.
El presunto agresor salió corriendo tras él, persiguiéndolo por las calles San Sebastián, avenida de Madrid, Dos de Mayo y Ladeira hasta las mismas puertas del cuartel de la Guardia Civil, en el que se refugió y denunció la agresión.
Una patrulla acudió a la vivienda y localizó al hombre, procediendo a su detención. Hoy será puesto a disposición del juzgado.
DOS HERMANOS QUE LLEVAN AÑOS EN LA CASA
Agresor y víctima llevan cuatro años residiendo de alquiler en la vivienda y, hasta ahora, no había mostrado tanta violencia. Dos de ellos son hermanos y los restantes primos. Abdelmounim E., que sufrió rasguños y hematomas durante el forcejeo, aún no acaba de creer ayer lo sucedido y se preguntaba qué pudo pasar por la cabeza de su compañero para ponerse tan violento.
Los cuatro tienen claro que no continuarán conviviendo con el presunto agresor en Xinzo, ni en Marruecos.
Mientras, la Guardia Civil mantiene una investigación abierta para esclarecer todos los detalles que provocaron la discusión y posterior agresión.
Los agentes también buscaban en la mañana de ayer los cuchillos que utilizó el supuesto agresor para amenazar a sus compañeros y, posteriormente, perseguir a una de ellos por la calle.
