Tras la pandemia, la familia de Ricardo Jardón decidió reinventar su negocio. De ganaderos, con vacas en la Serra do Larouco, decidieron darse a conocer más allá de Baltar, lugar en el que viven y al que quieren atraer nueva población. Crearon una página web para vender su carne on line en octubre de 2021, en febrero de 2022 construyeron una carnicería física y en abril un restaurante con sus productos. “Tras a pandemia complicouse o tema de sacar a carne, polo que decidimos reinventarnos, e foi posible grazas as axudas das cooperativas”, cuenta Ricardo Jardón.
Y es que esta cooperativa familiar recibió una subvención de 9.000 euros con el objetivo de fijar empleo y desarrollar su negocio en el concello de Baltar: “Grazas a esta axuda podemos xerar novos postos de traballo, seguir afincándonos no rural, que é algo moi interesante, porque se non apostamos por el, acabará desaparecendo”, añade Jardón, orgulloso de su trayectoria.
Ahora, el negocio funciona bien tras reinventarse y “completar a cadea” en todas sus fases. “As nosas vacas son criadas de forma tradicional, son vacas felices. Na tenda online e na carnicería non sempre temos todos os produtos, porque só traballamos co noso”, concluye.