Un equipo de la Facultad de Ciencias de Ourense verificó, tras medio año de trabajo, que una parte de la desecada laguna de Antela acoge a 200 metros de profundidad el mayor acuífero termal de Galicia, con una superficie de más de 30 kilómetros cuadrados y un grosor de entre 20 y 60 metros. La cantidad de agua bicarbonatada y sódica del subsuelo, aún por cuantificar exactamente, es de miles de millones de litros. El hallazgo puede abrir la puerta al aprovechamiento social y económico del acuífero.
Ya no es una hipótesis, sino algo totalmente verificado por expertos. El subsuelo de la antigua laguna de Antela (en los municipios de Sandiás, Sarreaus y Xunqueira de Ambía) acoge una enorme riqueza de agua termal. La confirmación de la ubicación del acuífero ha sido el resultado de medio año de trabajos de campo por parte de un grupo de técnicos de la Facultad de Ciencias del campus de Ourense, dirigido por el geólogo José Ramón Seara Valero.
Seara es concluyente, el acuífero se halla a unos 200 metros de profundidad al noreste de la carretera N-525 y ocupa unos 30 kilómetros cuadrados siendo, con mucho, el más grande de Galicia. El grosor o profundidad del yacimiento termal oscila, según las zonas entre los 20 y los 60 metros. Los cálculos son que la cantidad de agua termal que cobija el acuífero sea de miles de millones de litros.
La importancias del acuífero, según Seara Valero es que esto es algo que hasta ahora era inédito. Está plenamente confirmado que el acuífero está bajo capas de arcillas y lignitos del subsuelo limiano.
Agua de calidad
Además de la cantidad, todo hace apuntar a que el agua hallada también es de calidad. Los primeros análisis indican que el líquido contiene una composi ción química diferenciada de las aguas de A Limia, por su mayor nivel de concentración de sales. Es agua bicarbonatada y sódica y con contenidos moderados de sílice, litio y estroncio. Esto supone que sea susceptibles de ser aprovechada para un posible uso balneoterápico, según el profesor Seara, aunque esta posibilidad exigiría un mayor análisis químico. además de estudios de viabilidad económica para su explotación.
Seara expuso que nuestro objetivo esencial es que la población limiana y las autoridades conozcan esa riqueza termal hasta ahora desconocida en A Limia y se estudie su aprovechamiento para el beneficio social y económico de la comarca.
Las conclusiones del estudio realizado por los técnicos de la Facultad de Ciencias del campus ourensano ya está en manos de responsables de la Consellería de Industria, que financió el proyecto de investigación a mediados de este año, en un convenio con la Universidad. El análisis se realizó desde el verano con un equipo de aparatos de prospección geoeléctrica.
Seara es concluyente, el acuífero se halla a unos 200 metros de profundidad al noreste de la carretera N-525 y ocupa unos 30 kilómetros cuadrados siendo, con mucho, el más grande de Galicia. El grosor o profundidad del yacimiento termal oscila, según las zonas entre los 20 y los 60 metros. Los cálculos son que la cantidad de agua termal que cobija el acuífero sea de miles de millones de litros.
La importancias del acuífero, según Seara Valero es que esto es algo que hasta ahora era inédito. Está plenamente confirmado que el acuífero está bajo capas de arcillas y lignitos del subsuelo limiano.
Agua de calidad
Además de la cantidad, todo hace apuntar a que el agua hallada también es de calidad. Los primeros análisis indican que el líquido contiene una composi ción química diferenciada de las aguas de A Limia, por su mayor nivel de concentración de sales. Es agua bicarbonatada y sódica y con contenidos moderados de sílice, litio y estroncio. Esto supone que sea susceptibles de ser aprovechada para un posible uso balneoterápico, según el profesor Seara, aunque esta posibilidad exigiría un mayor análisis químico. además de estudios de viabilidad económica para su explotación.
Seara expuso que nuestro objetivo esencial es que la población limiana y las autoridades conozcan esa riqueza termal hasta ahora desconocida en A Limia y se estudie su aprovechamiento para el beneficio social y económico de la comarca.
Las conclusiones del estudio realizado por los técnicos de la Facultad de Ciencias del campus ourensano ya está en manos de responsables de la Consellería de Industria, que financió el proyecto de investigación a mediados de este año, en un convenio con la Universidad. El análisis se realizó desde el verano con un equipo de aparatos de prospección geoeléctrica.
