Era una de las actuaciones más demandadas y esperadas de la capital antelana: el tramo de la carretera N525 que atraviesa el núcleo urbano de Xinzo se convertirá, por fin, en un auténtica calle que priorizará al peatón, reorganizará el espacio destinado al aparcamiento de vehículos, ganará en seguridad e introducirá un carril bici.
Se trata de una petición que la alcaldesa de Xinzo, Elvira Lama, puso encima de la mesa en el transcurso de su mandato y peleó hasta conseguir financiación -una importante cuantía de 3,9 millones de euros- “en tiempo récord”, en palabras del delegado del Gobierno, José Miñones, que se desplazó hasta la villa limiana para participar en la presentación del proyecto. En el acto también estuvo presente la propia regidora socialista, el subdelegado del Gobierno en Ourense, Emilio González; el jefe de la Demarcación de Carreteras, Ángel Gónzalez y miembros de la Corporación local -además del equipo redactor del plan, documento que se someterá ahora a información pública-.
Durante la sesión de presentación -a la que asistieron también representantes de colectivos y asociaciones vecinales- se puso de manifiesto a través de simulaciones la nueva imagen, totalmente reformada, del principal acceso a Xinzo por la avenida de Ourense. La futura travesía limiana contará con aceras más anchas, nuevas rotondas, carriles bici y pasos elevados.
Por otro lado, se introducirá nuevo arbolado y zonas ajardinadas para lograr la humanización de este entorno, además de nuevo mobiliario urbano.
Se pretende, en definitiva, favorecer los desplazamientos a pie y fomentar la interacción vecinal, al tiempo que se reducen las emisiones de CO2.
La inversión se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que promueve el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. “Hoxe anunciamos unha obra extraordinaria e transformadora do vial principal da nosa vila. Vai a supoñer un antes e un despois na súa fisionomía, nos sevizos e na calidade de vida dos veciños”, dijo Lama.
