La conexión del saneamiento de Roimelo y Frieira a la depuradora mejorará la calidad del servicio
El Concello de Allariz está llevando a cabo las obras de conexión de la red de saneamiento del núcleo de Roimelo a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Allariz, ubicada en la carretera de Celanova. La interveción, explicaba el alcalde Francisco García, persigue "evitar unha depuración deficiente das augas residuais, que ademáis provocaba cheiros no verán".
Las fosas sépticas "teñen unhas peores condicións de depuración, por iso quixemos aproveitar a proximidade coa EDAR para eliminar a fosa de Roimelo e conectar o seu saneamento a rede municipal", explicaba el regidor. La actuación, con un presupuesto de 15.000 euros sufragados con fondos propios, pasa por la eliminación de la fosa séptica y la construcción de un kilómetro de nuevas canalizaciones.
57 fosas para 92 núcleos
La actuación se suma a la efectuada el año pasado en Frieira, con una inversión de 20.000 euros que permitió eliminar los vertidos al río Frieira. La elección de estos dos núcleos obedece a su proximidad al casco urbano de Allariz, si bien García Suárez dijo que "continuaremos con esta política de eliminación de fosas e conexión coa EDAR na medida das nosas posibilidades e da propia capacidade da depuradora". Instalaciones que, salvo en verano que con el aumento de la población trabajan al límite y requieren medidas complementarias por parte de la empresa concesionaria, tiene capacidad para absorber nuevos núcleos.
No obstante, en este punto, el alcalde reiteraba las peticiones realizadas a la Confederación Hidrográfica del Miño Sil para reforzar la EDAR con la construcción de un tanque de tormentas, una mejora de la capacidad en el control de llegada a la planta y también la dotación de nuevas tecnologías en la propia planta.
En la actualidad, en Allariz existen un total de 57 fosas sépticas que dan servicio a 92 núcleos de población.
Análisis de la calidad del agua
El Concello todavía está a la espera de conocer los resultados de los análisis realizados por la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil en el río Arnoia, así como en la propia EDAR, a raíz de la aparición de truchas muertas el primer fin de semana de septiembre.
El alcalde nacionalisa confirmó ayer que los contra análisis realizados por la empresa adjudicataria con las muestras tomadas por el organismo de cuenca "descartan calquera tipo da anomalía. O control é positivo, os vertidos da EDAR están dentro dos parámetros legais", aseguró García, que desde el primer momento defendió la hipótesis de que los peces perecieron por las condiciones de sequía extrema que padece la provincia y una falta de oxígeno en el agua.
