La localidad despedirá nueve días de celebraciones con el maratón
Emoción, cánticos, carreras y música protagonizaron ayer en Allariz la octava jornada de celebración consecutiva en el día grande de la Festa do Boi. La charanga Sugarri se sumó por fin a los festejos y, con los carismáticos Zés Pereiras que desembarcaron con sus tambores el viernes, la villa se convirtió en un hervidero musical para todos los estilos y edades con el "Ahí ven o boi" como cántico estrella.
La masiva presencia de vecinos llegados de localidades cercanas, pero también de A Coruña, Vigo, Pontevedra y mismo desde Euskadi, donde el "boi" tiene un amplio número de aficionados que marcan en rojo este fin de semana de "troula" alaricana, se hizo ver desde la tarde-noche del viernes. "A valoración da festa está sendo positiva, a verdade. Salvo o primeiro día, o tempo respectounos e mesmo estamos satisfeitos de que non houbo ningunha incidencia de gravidade, nin nas carreiras nin na festa", señalaba Juan Seara, portavoz de la Asociación Xan de Arzúa encargada de la organización de los festejos.
La carrera de ayer, la más concurrida y también la más peligrosa por la gran aglomeración de personas, se saldó con una persona herida. Según fuentes de Protección Civil, el hombre se encontraba mirando la carrera cuando cayó al suelo y sufrió un corte en la cabeza.
Para la despedida dominical, habrá sesión doble de pasacalles con Sugarri y Zés Pereira a las 13,30 y 18,00 horas. El Maratón do Boi, previsto para las 19,30 horas, permitirá que cuatro ejemplares, alternativamente, den su último paseo por el casco histórico antes del fin de fiesta en la Praza Maior y procesión, con murga incluida, de Xan de Arzúa hasta la Casa do Boi.
