La Fundación Aquae Querquennae-Vía Nova de Bande acaba de iniciar una nueva campaña de excavaciones en el campamento militar romano de Porto Quintela
Una brigada de seis personas dirigida por el arqueólogo Santiago Ferrer trabaja ya en la excavación de tres cuadrículas de 200 metros cuadrados cada uno que persiguen el doble objetivo de "continuar la excavación de dos barracones de tropa que venimos desarrollando en campañas anteriores y también iniciar los trabajos en un nuevo edificio, que creemos que son las antiguas letrinas del campamento", explica Santiago Ferrer.
La aparición de unos restos de muros en superficie en el ángulo sur occidental del yacimiento ha animado a los responsables de la fundación en centrar parte de la campaña en esa zona con el objetivo de certificar de que se trata de las letrinas. "Es una hipótesis de trabajo, pero sería raro que no se confirmase. Es la situación en la que suelen emplazarse, comparándolo con otros campamentos de la época, además es el único edificio en la zona de intervalum, la línea de 11 metros que separa la muralla de la primera zona de edificación", explica el arqueólogo.
Dos meses
Los trabajos, que se desarrollarán hasta finales de octubre, se centrarán en labores de excavación para, en futuras ediciones, consolidar los muros con una altura similar a la desarrollada en el resto del yacimiento. El campamento militar data del siglo I y, según las investigaciones de la fundación, pudo alcanzar los 25.000 metros cuadrados y dar cabida a unos quinientos legionarios. "A pesar de ser uno de los más excavados, aún falta más de la mitad", advierte Ferrer, que reconoce que "los visitantes se quedan alucinados cuando llegan aquí y ven esto, porque no se lo esperan".
