Las altas temperaturas de los últimos días, que incluso posibilitaron los baños en la playa, provocaron un acelerón en el desarrollo de unas cepas, cuyos brotes ahora son amenazados por el riesgo de que hagan acto de presencia las heladas. El anunciado descenso de temperaturas ya provocó la bajada del mercurio de los termómetros hasta los 1,6 grados bajo cero en Manzaneda. El frío no es tan intenso en altitudes inferiores, no bajando de los 5 grados en los valles del oriente provincial, pero las previsiones que maneja Meteogalicia hablan de unos registros que descenderán hasta apenas 2 grados de mínima el miércoles 1 de mayo en los concellos de O Barco, A Rúa, Vilamartín o Rubiá, cayendo hasta 1 grado en las tierras de O Bolo o Larouco.
Valdeorras
En los viñedos de Valdeorras, la brotación arrancó en torno al 20 de marzo, en fechas muy similares a las de 2023, año en el que la vendimia comenzaba muy adelantada, el 20 de agosto, siendo la más temprana en la historia de la Denominación de Origen. Sin embargo, en la última semana, el desarrollo se aceleró consiguiendo que en la actualidad, los brotes vayan entre 7 y 10 días más adelantados que en la campaña anterior, según apuntaron en el Consello Regulador que preside José Ramón Rodríguez Castellanos. Ahora, la preocupación en la denominación valdeorresa son las heladas, pues podrían causar daños muy serios en las viñas.
Ribeira Sacra
En la D. O. Ribeira Sacra, las cepas llegaron a las dos últimas semanas con un cierto retraso respecto a años anteriores, situación que corrigieron rápidamente con la subida de las temperaturas. “Creceron moito estos días de calor e recuperaron o atrasado”, apuntó Antonio Lombardía Crespo, presidente del Consello Regulador de la D. O. “Nos últimos días foi unha locura”, añadió, para finalmente apuntar que en estos momentos, el desarrollo de las cepas es similar al de otros años.
Ribeiro
Desde la Denominación de Origen Ribeiro, su presidente, Juan Manuel Casares Gándara, confirmó un adelanto en la cosecha de varias semanas, siguiendo la tendencia de los últimos años. Hace poco más de tres semanas que aparecieron los brotes en las cepas y las condiciones climatológicas de lluvias y calor han sido favorables hasta el momento para facilitar una buena producción abundante y de calidad.
No obstante, todavía es muy pronto para adelantar acontecimientos y los productores están pendientes de cómo evoluciona el tiempo, especialmente en la primera mitad del mes de mayo, cuando son altas las probabilidades de que se produzcan heladas.
Juan Manuel Casares recuerda las pérdidas importantes por este motivo en el año 2017, en que se habían producido fuertes heladas los días 27 y 28 de abril, porque “con los segundos brotes la capacidad productiva es menor”, matiza.
Monterrei
Preguntado por la situación en la comarca de Monterrei, Miguel López, técnico de la D.O., tiene muy claro que aún es muy pronto para determinar cómo será la cosecha de este año: “Aínda estamos nun estadío moi prematuro. Hai poucos días tiñamos unhas temperaturas elevadísimas e moi boas reservas hídricas, condicións que fan brotar as prantas con máis velocidade, adiantando o ciclo fenolóxico”. Sin embargo, si la tendencia del tiempo cambia, en su opinión “isto ralentizará un pouco o seu crecemento”.
En todo caso, la realidad es que el cambio climático está adelantando las vendimias, que están pasando de realizarse “dende mediados de setembro a finais de agosto”, añade López. La consecuencia más directa de un adelanto en la maduración es que la uva “ten moito máis azucre e menos acidez. Por tanto, convén adiantar a vendima para obter uvas que dean como resultado viños equilibrados, e non máis alcólicos do normal”, concluyó.
